Si ómicron se propaga en Rusia a un ritmo igual que en otros países, el número de los nuevos casos diarios podría aumentar hasta unos 80.000 - 90.000 a inicios de febrero, desde los actuales 30.000, y hacia la primavera el total de los infectados con esa nueva variante del coronavirus pueden llegar a 1,5 o 2 millones de personas, dijo a Sputnik este martes el asesor del presidente del Centro de Estudios Estratégicos, el biólogo Evgueni Tonevitski.

Según datos del 17 de enero, los casos del covid-19 aumentaron en 30.726 en un día en Rusia, sumando 10.834.260.

El experto subrayó que la propagación de la infección dependerá, en primer lugar, de la responsabilidad de las personas. "Según evaluaciones de la Organización Mundial de la Salud, solo el uso de la mascarilla durante los contactos diarios podría llevar a la disminución de un 30 por ciento de los casos, hasta unos 60.000- 65.000 al día", agregó.

En el mundo entero se registra actualmente el crecimiento exponencial de los casos de coronavirus vinculado con la variante ómicron. Se supone que las mutaciones que ha acumulado esta variante durante su evolución le permiten "esconderse" del sistema inmune y reproducir más rápido sus copias en las células del ser humano, comentó el científico.

También afirmó que solo la vacunación permite disminuir el riesgo de contagio y la sucesiva hospitalización. "Por ejemplo, en Estados Unidos la mayoría de las camas con aparatos de ventilación mecánica del pulmón están ocupadas actualmente por pacientes no vacunados que se infectaron con la cepa ómicron", recordó.

Según el canal de televisión NBC News, el 11 de enero EEUU registró más de 1,3 millones de casos diarios del covid-19, alcanzando el 17 de enero 65.698.495 casos en total.

El arma global de lucha contra el coronavirus es la inmunidad colectiva, que en Rusia excede el 60 por ciento en estos momentos, "lo que es insuficiente para que nuestro sistema de sanidad logre afrontar con éxito la nueva ola del covid-19", agregó el biólogo.

La nueva variante del coronavirus, detectada por primera vez en África en noviembre pasado, llamada ómicron, se caracteriza por un alto grado de contagiosidad y, según expertos, es capaz de evadir el efecto de las vacunas existentes, pero al mismo tiempo no provoca en las personas mayores el desarrollo de la enfermedad tan grave como las anteriores.

Las autoridades rusas están estudiando las medidas a tomar, incluidas las que se aplican ya en el extranjero, para elegir las mejores. Este martes se espera una reunión del centro coordinador nacional de lucha contra el coronavirus, que se celebrará bajo la presidencia del primer ministro de Rusia, Mijaíl Mishustin. 

Fuente: Sputnik