Las lluvias registradas en la última semana comenzaron a mejorar de manera parcial el estado de los cultivos de trigo y girasol, de acuerdo a la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA).  De acuerdo a la entidad bursátil, el panorama varía de acuerdo a la región y en el caso del trigo, en zona centro y sur de Buenos Aires se esperan mejoras, mientras que en norte, con precipitaciones más escasas, el cereal presenta un impacto casi irreversibles a la hora de proyectar rendimientos.

En el caso del girasol, mientras en el centro y norte de Santa Fe las lluvias permitirán retomar las tareas de siembra, en el NEA la implantación está sujeta a nuevas lluvias, que de no suceder provocarán un nuevo ajuste en el área sembrada de la oleaginosa.

Con respecto al trigo, si bien desde la BCBA consideraron que temprano para evaluar el grado de recuperación a partir de las últimas lluvias, se espera una mejora en los próximos días. En el caso de las siembras tempranas, se esperan reducciones en los rindes, al igual que el cereal del norte, cuya capacidad de recuperación será reducida.

Las buenas noticias para el cultivo llegan desde Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y el norte de Buenos Aires, en donde las últimas precipitaciones frenaron el  deterioro. Desde la bolsa porteña explicaron que “estas recargas de humedad llegan al inicio de las etapas críticas del cereal”. En el caso del sur y sudeste bonaerense, donde el trigo prácticamente no presentaba daños, las lluvias brindaron un nuevo impulso de crecimiento y de recuperación del golpe de las heladas.

 Por el lado del girasol, el agua recibida en los lotes del centro y norte santafesino permitiría retomar la siembra y mejorar el estado del cultivo ya implantado. En la región NEA, el avance de las tareas de siembra depende de la evolución de las lluvias en los próximos días.