Luego de dispararse por el paro, el precio de la carne recuperó el equilibrio en julio
El precio de la media res que se vende en las carnicerías registró una baja, situación que permite a este eslabón empezar a recuperar rentabilidad. En la primera quincena de junio hubo aumentos en los mostradores
El precio de la carne vacuna en los mostradores de las carnicerías registró un aumento de 8% durante la primera quincena de junio, de acuerdo a un relevamiento efectuado por la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra). Analistas ganaderos consultados por este medio explicaron que el cese de comercialización de hacienda lanzado por la Mesa de Enlace, tras los anuncios del cierre de exportaciones, impactó en el precio de la hacienda y tuvo el traslado a los mostradores informado por Ciccra.
Con el fin de la medida, los valores en el Mercado de Liniers se fueron reacomodando hacia la baja y de acuerdo a estadísticas del sector de abastecedores, la media res que baja en los comercios registró una reducción de 21,2 pesos. En este nuevo escenario, los carniceros ensayan una estrategia ante la caída en la venta de asado, que consiste en presentar ofertas para los cortes parrilleros y aumentar el valor de las carnes sin hueso.
La Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), elabora cada mes un resumen con los principales números del negocio. Entre estas variables, analizan el valor de la media res, a partir de un precio de referencia de la hacienda de consumo en Liniers. Al comparar junio y julio, se puede visualizar las oscilaciones que marcan tanto desde la entidad que representa a la industria como los analistas del sector.
El mes pasado, y tomando como referencia un novillito de 360 kilos a 200 pesos, la media res se comercializó en 437,9 pesos el kilo. Este mes, tras el efecto del cese de comercialización, la misma categoría se ubicó en 190 pesos, y el valor de la media res disminuyó hasta los 416,7 pesos. “En este período, el carnicero pudo salir de la situación de rentabilidad negativa”, explicaron desde la entidad que nuclea a los matarifes.
La primera quincena de junio dejó varios datos para tener en cuenta, de acuerdo a Ciccra. En el Gran Buenos Aires, y por segundo mes consecutivo, las carnicerías registraron las mayores subas, con un 8,9% versus el incremento de 5,7% que se vio en los supermercados. La entidad, presidida por Miguel Schiariti, consignó que las mayores subas fueron en carne picada común (11,9%), osobuco (11,3%) y carnaza común, con 11%2.
El resto de las carnes también aumentaron, de acuerdo a Ciccra. En el caso del pollo, la suba fue de 3,7% mensual, con una suba de 4,3% en las carnicerías y de 1,1% en las grandes superficies. Por su parte, el precio del pechito de cerdo mostró una corrección de 1%, producto de una suba de 1,3% en carnicerías y de una baja de 8% en supermercados.
En este contexto, el Gobierno nacional analiza la posibilidad de limitar las actuales restricciones a las exportaciones de carne, con el objetivo central de confirmar la continuidad del acuerdo de Precios Populares, rubricado en su momento con el Consorcio Exportador ABC. Según trascendidos, tanto oficiales como del sector privado, la medida alcanzará a los siete cortes parrilleros de vaca y a los del cupo Kosher, destinados a Israel.
En la actualidad, el programa de ofertas contempla un volumen mensual de 8.000 toneladas, distribuidas entre once cortes y que se pueden adquirir en supermercados y el Mercado Central. En las últimas negociaciones, previas al cierre de exportaciones anunciado por el presidente Alberto Fernández, se estudió la posibilidad de llevar el volumen a 12.000 toneladas mensuales, de las cuales 7.000 serían suministradas por los exportadores nucleados en ABC.