"Sin industria no hay nación", reza la consigna de una cámara empresaria y, con las salvedades del caso, no le falta razón.

El modelo "extractivista" (tal vez con "renta universal" (1)), que impiadosamente impone sobre las ruinas del aparato productivo el desempleo y las privaciones de los trabajadores, no puede darles sustento ni dignidad a los más de 47 millones de personas que habitan este suelo.

Oportunamente, en "El industricidio libertario" (BAE Negocios, 21/10/2024) se analizó cómo, entre otras causas, la decidida apertura del comercio internacional (de manera indiscriminada) no solamente agudiza la supercrisis (2) sino que, como consecuencia de la apreciación del peso, se completa el "combo" proextinción de la producción manufacturera.

Asimismo, se resaltó que la utilización de la capacidad instalada en algunos agrupamientos (textiles, plásticos o metalmecánicos) "perforó" el 50%, mientras que otros también relevantes (como el automotor) se encuentran cerca de ese guarismo. A su vez, sobre el nivel de actividad se indicó la disminución que viene aconteciendo desde agosto del año pasado, hasta su última medición realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) para el mismo mes de 2024.

La permanencia en estos niveles generará daños irreparables, tanto en el tejido productivo como en el laboral.

Es que, como se afirmó en "¿El fin de la industria manufacturera?" (BAE Negocios, 19/05/2024), "el proceso libertario, que conduce Argentina va a contramano de la impronta impuesta por el Nuevo Orden Internacional (3), donde las concepciones nacionalistas impulsan políticas económicas cuidando, ad intra, los aparatos productivos locales, con su consecuente creación de puestos de trabajo". Una clara muestra de ello es la reciente imposición en Estados Unidos de un arancel del 100% sobre la importación de vehículos eléctricos chinos, al mismo tiempo que la producción doméstica comienza a ser desplazada por la proveniente del exterior.

Otro ejemplo palmario de lo ut supra señalado es la relocalización (dentro de sus fronteras) de la fabricación de semiconductores, la cual había sido extranjerizada durante la globalización. De todos modos, y a pesar de la actual administración libertaria, debe quedar en claro que la única opción para que el pueblo tenga trabajo es...

Una Argentina fabril

A tiempo, en "Hagamos Argentina industrial otra vez" (BAE Negocios, 9/06/2023) se planteó que nuestro país tenía la oportunidad (y la necesidad) de retomar el sendero manufacturero que supo transitar, contando con:

• un mercado de dimensiones apreciables, apto como plataforma inicial de sustento
• trayectoria y experiencia en muchas de sus ramas, así como también importantes sectores de mano de obra disponible
• institutos de formación especializados y terciarios
• un sector empresarial capacitado y flexible.

Se afirmó, luego, la existencia de un consenso generalizado de que el sector de marras es el principal proveedor, en forma directa o indirecta, de puestos de trabajo de alto valor agregado, además de ser un gran generador de procesos de innovación y desarrollo.

No obstante, convive con otros que son abastecedores de materias primas de elevada productividad, como la originada en la zona núcleo de la Pampa húmeda y la energía de origen fósil, determinando ambas (ya que una correcta política económica necesita de un solo tipo de cambio y no varios diferenciados por tipo de actividad) que la industria argentina debe ser fomentada.

En aras de esto resulta indispensable procurar una macroeconomía consistente, con superávits gemelos (4), que facilite la convocatoria a un magno acuerdo social donde los actores empresariales, sindicales, religiosos y sociales alcancen compromisos de mediano y largo plazo que abarquen no solo los precios relativos, los sueldos y salarios, los tipos de interés, las tarifas de los servicios públicos, las tasas, las contribuciones, los derechos y los impuestos sino también:

• la búsqueda de los "mercados de referencia" (5) plausibles para "nuestro buen vivir",
• la determinación de las "tecnologías convenientes" (6) a utilizar, procurando el mejor "estado del arte"
• una nueva distribución del ingreso que impida el incremento (perjudicial para la gobernanza del todo social) de la "plusvalía relativa" (6).

Además, entre las condiciones necesarias para el lanzamiento de un ciclo económico ascendente por estos lares se requiere retornar a una proporción razonable entre los ingresos populares (jubilaciones, pensiones, sueldos y salarios) y los precios de los alimentos que integran la Canasta Básica Alimenticia.

En esa dirección, una Ley de Arrendamientos Rurales Compensada en la Zona Núcleo de la Pampa Húmeda (7) sería el instrumento idóneo para alcanzar el objetivo ya que al disminuir considerablemente el costo total que debe afrontar el productor (mediante el establecimiento de derechos de exportación apropiados) se desalinea (a la baja) el precio de los alimentos domésticos frente a los valores internacionales.

Al mismo tiempo, para dotar con rentabilidad a las empresas industriales es fundamental el abastecimiento energético en la cantidad necesaria a un precio competitivo. Esto se logrará calculando los costos de la matriz energética y agregando una ganancia justa y adecuada sobre el capital total empleado (en su etapa de exploración, explotación, transformación, logística y comercialización).

En síntesis, "alimentos básicos a un precio razonable" y "energía abundante y barata son los dos vectores que garantizarán la reconstrucción del complejo industrial argentino".

Es hora que el conjunto de la dirigencia política, empresarial, sindical, social y religiosa se mancomune y genere las bases para implementar en nuestro país un Modelo de Desarrollo Económico Permanente y Sustentable (Modepys) con orientación a la Producción.

¡Dios guíe a los decisores!

Lic. Guillermo Moreno
Lic. Pablo Challú
Lic. Walter Romero

Agradecemos la colaboración de Roberto Nuesch

1- Para profundizar su concepto, se puede consultar: "Nacionalismo vs. Globalización Parte II" BAE Negocios (10/09/2024).

2- Se define como Supercrisis a la situación generada durante la "Administración Cambiemos", a partir de la convergencia de dos desequilibrios macroeconómicos: el fiscal, parecido al que provocara el colapso del gobierno de R. Alfonsín, y el externo, similar al de F. de la Rúa.

3- Para precisar lo mencionado, se recomienda la lectura de: "Las Américas y el Nuevo Orden Internacional" (BAE Negocios 26/01/20).

4- Los Superávits Gemelos, refieren al saldo positivo del Resultado Fiscal Primario y de la Balanza Comercial.

5- Denominamos Mercados de Referencia al espacio productivo destacado por presentar un "estado del arte" adecuado.

6- Tecnología conveniente: concepto largamente desarrollado, entre otros, por el Lic. Jorge Zaccagnini.

7-  Plusvalía relativa: es la porción de plusvalor, extraído de la fuerza de trabajo, por unidad de tiempo.