REC 2024 en Concepción: 150.000 personas participaron en festival gratuito más grande de Chile
En su novena edición, el festival de música gratuito más importante de Chile volvió a demostrar que no hay "Tropiconoce" que pueda contra la potencia de la música. Tocaron A.N.I.M.A.L., Usted Señalemelo, Javiera Electra, Los Santos Dumont, Rama, Dënver, entre otros, y cerraró una banda histórica que volvió para enloquecer, con razón, al público chileno. Enterate de todo en la nota.
Algo especial corre en las venas de estas tierras, en el centro sur de Chile. En Concepción, donde desde hace 9 años se reconstruye la historia de la música local e internacional, dos días al año confluyen importantes bandas que aceleran el pulso de los penquistas. A la vera de esta ciudad y del imponente río Biobío, cuatro escenarios recibieron en la primera jornada de REC 2024 a una veintena de artistas que se atrevieron a casi todo.
Amaneció nublado y con lluvia, pero ni el pronóstico desfavorable detuvo a los cientos de chilenos que este sábado le pusieron el pecho al clima inestable. El "Tropiconoce", como le llaman por aquí, no asustó a nadie: 150.000 personas saltaron, bailaron y cantaron en el festival gratuito más grande del país, un gigante hecho a base de estrofas y corazón, prolijamente organizado por Teatro Biobío y la Gobernación de esta región.
Entre los artistas que se subieron a los escenarios repartidos entre el Parque Bicentenario y el Teatro local, sonaron los esperadísimos Los Bunkers, A.N.I.M.A.L., Usted Señalemelo, Niños del Cerro, Los Santos Dumont, Rama, Dënver, Fother Muckers, Canarito & Surcos, The Polvos!, La Georgie Boy, Hierra, The Slow Voyage, Larrea Trip, Javiera Electra, Niño Cohete, Big Band Concepción, Delavieja. La Cumbia, Maysa Lozano, Mondongo, Respect, Mujeres en Concierto, y desde temprano hubo una Batalla de Gallos que recordó a los mejores tiempos del sonido urbano del Quinto Escalón porteño.
Los primeros en llegar al espacio Entel fueron los integrantes de Mondongo, una banda local orientada al público infantil que pisó el escenario con mamelucos naranjas y al grito de “cuando me preguntan que música pongo yo les respondo que pongo Mondongo“, invitando a mover el cuerpo y preparar el espíritu, todavía con algunos charcos en el campo.
Un rato después Concepción tuvo la oportunidad de ver el arte musical de Javiera Electra, una novedad local con mucho folk y energía a prueba de todo. Podría decirse que hay muchas grandilocuentes decisiones políticas impresas en el espectáculo que plantea Electra Hernández, una artista escénica que además es la primera participante trans en ser invitada a REC en sus nueve años de vida. En escena, la cantautora desplegó todo su carisma y una voz hipnótica con la que repasó un variado repertorio en el que también reversionó a Violeta Parra. “Traer ciertos temas fue una decisión muy particular que me reúne con mis raíces, con las que tantas veces estuve distanciada. Cantar a Violeta Parra, que representa la rebeldía de la anti-cueca, muestra un poco de lo que quiero generar. Si como ella tuviera que dejar algo con mi música, sería esta idea de que se puede dibujar por afuera del margen. La rebeldía propia de mi música, que por primera vez llega a este espacio”.
La tarde siguió su curso, ya con el sol en ascenso, cada vez más gente llegó a pie al predio, en el que además hubo una oferta gastronómica variada y a precios módicos. Pero ya hablaremos de eso, por ahora sigamos con el lineup de REC. Pasadas las 17, era la hora del indie que aterrizó sobre las tablas todavía húmedas con los chilenos de Niño Cohete, una banda que también está volviendo a escena después de ocho años, y a fuerza de folk y pop despertaron de la siesta a esta ciudad. Muy queridos entre los penquistas, cantaron algo más de una hora y recordaron a su público que, así como la pausa que la banda se tomó en 2017 era justa y necesaria, el regreso los encuentra con más música en común, que diferencias.
Santos Dumont fue otras de las locales del circuito independiente que pisó fuerte este sábado. Julián Peña, Marcelo Díaz, Mauricio Melo, Nicolás Ferrada y Alberto Rojas ya participaon en la primera edición del festival en 2015. Ahora, después de algunos años separados, el 2024 los reencontró con su público a quién le regalaron algunos clásicos, como "Ayer" . El público, agradecido, cantó a la par del vocalista, sin errar una línea.
Un rato más tarde la segunda vuelta del indie la darían los mendocinos de Usted Señálemelo, con una espectáculo que incluyó bajar del escenario y cantar con el un público que los conoce bien. En simultaneo, un poco más lejos, en el espacio Vans, otros argentinos volvían a demostrar que la buena música es mejor aún que el buen vino. Pasaron 30 años, aunque usted no lo crea, y A.N.I.M.A.L. está mejor que intacto, con su público propio y esa exquisitez de un sonido curtido por la experiencia y los tiempos. Ese meridaje perfecto nos permitió escuchar una síntesis de lo mejor de estas tres décadas, comprimidas en algo más de una hora, ideal para los fans locales que por primera vez los ven en vivo, mientras esperan el nuevo material que está en pleno proceso de elaboración. Lo prometido es deuda, esa afirmación no se le discute a ningún fandom.
“Nos encanta participar de contextos como estos, un festival te permite elegir cuidadosamente lo que vas a mostrar al público y lo que sentimos en este show es que acá hay mucha gente que nos conoce y se sumó”, dijo Andrés Giménez luego, en conferencia del prensa. Al ser consultado por Crónica sobre la importancia de los festivales gratuitos, el musico destacó: “A.N.I.M.A.L no es una banda politizada, nosotros estamos para cantar con el gobierno que sea, pero creemos que los eventos gratuitos fomentan cosas que son positivas, siempre vamos a estar para la gente”.
Mientras los argentinos hablaban con la prensa, el plato fuerte del festival estaba a pleno. Cuando Los Bunkers, de Chile y con amor, pisaron las tablas, las ya más de 150.000 humanidades estallaron. Hacía un rato que los penquistas esperaban con ansiedad para ver a estos verdaderos ídolos que, después de años separados, en 2023 anunciaron algunos shows y sus ganas de volver a expresarse en unísono.
Esta no es una banda de rock más para el público chileno. Muchos recuerdan todavía como los consagrados artistas irrumpieron aquel 13 de diciembre del 2019 en Plaza Dignidad, ocho semanas después de iniciado el estallido social con protestas en la calle y represión. Aquel día, Los Bunkers tocaron sobre un camión frente a miles de personas. Fue una manera de abrazar y acompañar a los chilenos en tiempos difícil, pocos artístas se animaron a tamaña expresión y la gente no olvida. Un poco de este amor y respeto flotó esta noche de sábado en Concepción. Con un tono de festividad más marcado, pero con la intensidad de quienes se conocen y valoran por el camino recorrido.
Hubo una impresionante bola de espejos, saltos, bailes y gritos el loop, y un rato antes de las 23 el show terminó y las luces de una épica primera jornada se apagaron. La ciudad se apuró para ir a dormir, porque la fiesta sigue.
Este domingo Concepción despertó soleada y promete un día más apacible, en el que otras 20 bandas como UB40 y El Mató a un policía motorizado y Congreso, entre otras, lanzarán sus magias al viento en una ciudad que, ya hemos dicho, late de una manera diferente, con el pulso y la pisada propios de la buena música.