En medio de un escenario institucional y político convulsionado, San Lorenzo aprobó la implementación de un bono obligatorio de 10.000 pesos para el clásico contra Huracán, válido por la séptima fecha del Torneo Clausura. La medida se definió en la reunión de Comisión Directiva realizada el lunes en el palco de la platea norte del estadio Pedro Bidegain.

El club atraviesa días agitados. Algunos integrantes de la Comisión Directiva evalúan renunciar a sus cargos y persisten las tensiones internas por la conducción, la situación económica y los proyectos estratégicos. En la última reunión, además de la decisión sobre el bono, se discutieron contratos, pases, balances y avances en la Vuelta a Boedo, lo que dejó expuestas diferencias políticas que vienen acumulándose.

A la par, la actual gestión presentó un informe de Tesorería que detalló ingresos por 12.665 millones de pesos y egresos por 11.900 millones en los últimos tres meses. El manejo de los recursos y las prioridades de inversión siguen siendo ejes de debate, en un contexto donde la necesidad de liquidez choca con las demandas de distintas áreas del club.

El partido entre San Lorenzo y Huracán todavía no tiene fecha ni horario confirmado, pero será el único clásico que el “Ciclón” dispute como local en el certamen. Ante River jugó en el Monumental y visitará a Racing e Independiente en Avellaneda.

Según comunicó la dirigencia, el bono se aplicará tanto a socios como a no socios, y su recaudación se destinará exclusivamente a la modernización de la infraestructura del fútbol juvenil. Se contemplarán excepciones para casos especiales, como grupos familiares, y se detallará el uso de los fondos una vez efectuada la recaudación.

La proyección oficial estima que el ingreso podría rondar los 250 mil dólares, una suma que en el contexto económico actual se considera estratégica para el club. No se especificó si los abonados deberán realizar el pago extraordinario o estarán exentos.

No es la primera vez que el fútbol argentino recurre a este tipo de cobro en partidos de alta convocatoria. Sin embargo, en San Lorenzo no se aplicaba para un encuentro de campeonato desde hace varios años, lo que generó reacciones divididas entre los socios: mientras unos ven la medida como un aporte necesario para sostener y mejorar las divisiones juveniles, otros cuestionan que se sume un gasto extra en un contexto económico difícil para todos.

En el plano deportivo, el equipo que dirige Damián Ayude visitará a Platense en Vicente López, con público visitante, y luego recibirá a Instituto antes de enfrentar a Huracán, partido que ya se empezó a jugar fuera de la cancha con esta polémica decisión.