Alerta en la economía por recesión técnica: "La recuperación en forma de V quedó muy atrás"
Condicionada a lo que suceda luego de las elecciones, la economía cerraría 2025 con un alza de entre 3,1% y 3,7%, por el buen desempeño de comienzos de año. Informe de la Fundación Capital de Matrín Redrado.
El estancamiento que la economía viene acusando en los últimos meses derivó en una corrección de las proyecciones de crecimiento por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la mayor parte de economistas y consultores, al punto que ya se dio a conocer la primera advertencia de una recesión, con dos trimestres consecutivos de caída.
Así lo señaló la Fundación Capital, en un informe en el que señala que “a la retracción del PBI de 0,1% trimestral del segundo trimestre, se adiciona la baja estimada para el tercero de 0,8%, entrando así en recesión técnica”.
Esa retracción compensaría la recuperación observada en el primer trimestre del año e hizo proyectar a la entidad dirigida por el ex presidente del Banco Central, Martín Redrado, un año con una mejora promedio del 3,1% al 3,7%, en función de lo que ocurra luego de las elecciones.
“Los datos rojos de la actividad económica que confirman que la recuperación en forma de “V” quedó muy atrás, se dan en el marco de tensión cambiaria, tasas de interés reales elevadas y volátiles y mayor incertidumbre en la previa electoral, a los que se adiciona que el ancla salarial continuará operando”, señaló a BAE Negocios la economista de la Fundación Capital, Andrea Osorio.
Respecto al deterioro del poder adquisitivo, indicó que "más allá del bajo pass through verificado durante el 2025, lo cierto es que la inflación se acomodó más cerca del 2% mensual, con paritarias que continúan en torno al 1%-1,5%, con un empleo en el sector privado que muestra una dinámica tipo ‘L’”.
Una caída esperada
La caída del segundo trimestre “ya se verifica en varios indicadores adelantados”, acotó Osorio.
En ese sentido, recordó que “si bien el índice de producción industrial manufacturero marcó una leve mejora del 0,6% mensual en agosto en la medición sin estacionalidad, esta no compensó la baja del 3,7% del bimestre previo”.
“Por su parte, la producción de autos concluyó el tercer trimestre con una baja del 20% frente al segundo cuarto del año, en cuanto a la construcción, el Índice Construya y los despachos de cemento para los que hay disponible información hasta septiembre, confirman bajas trimestrales del 4,6% y 5,3%, respectivamente”.
Asimismo, puso de relieve que “la recaudación de IVA DGI disminuyó 1,8% real en el tercer trimestre, el consumo masivo un 0,5% en julio-agosto y el patentamiento de autos un 0,3% en el tercer trimestre, tras cuatro trimestres de importante crecimiento”.
“Además, los préstamos personales y de tarjetas de crédito cayeron 0,4% real en septiembre, en un contexto de tasas de interés elevadas y morosidad en hogares en aumento (5,6% en julio vs. 2,6% en diciembre)”, añadió, para destacar que “esto es particularmente importante, en tanto fue uno de los principales motores de la recuperación del 2024”.
Qué es una recesión
La recesión es una caída generalizada de la actividad económica de un país y se considera que se produce cuando se suceden por lo menos dos trimestres consecutivos de retracción del Producto Bruto Interno (PBI).
En caso de que las estimaciones de la Fundación Capital se plasmen en las mediciones oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), se entraría en la señalada recesión.
Al respecto, el informe del Indec sobre el segundo trimestre fue coincidente con el de la Fundación en establecer una caída intertrimestral desestacionalizada del 0,1%, si bien en la medición interanual hubo una suba del 6,3%, debido a la baja base de comparación que representó el período abril-junio de 2024.
Que pasará en el cuarto trimestre
La incógnita del cuarto trimestre se develará en función de cómo responderá la economía al resultado electoral del 26 de octubre, el impacto más allá de lo financiero de la asistencia del Tesoro de los Estados Unidos y la estrategia política del Gobierno para sellar alianzas legislativas que le permitan asegurar la gobernabilidad y llevar adelante lo que el presidente Javier Milei denomina “reformas de segunda generación”.
En ese sentido, Redrado destacó días atrás la importancia del apoyo estadounidense en cuanto a que despeja dudas sobre la capacidad de pago de la deuda.
No obstante, advirtió que “si no empezás a generar dólares de exportación o inversión, lo de (el secretario del Tesoro, Scott) Bessent puede ser otro puente de seis meses como lo del FMI”, pero hay que tener en cuenta que “el Tesoro no pondrá plata siempre si la balanza de servicios genera un déficit de USD 11.000 millones”.
Asimismo, puso el acento en que “Estados Unidos se ha dado cuenta de que para no perder influencia en América Latina tiene que poner plata, financiamiento, que es lo que le ha permitido a China avanzar en los últimos 15 años sobre la región”.
Ya hubo ayudas similares
Pero recordó que asistencias similares, como el blanqueo de USD 20.000 millones del año pasado y el puente del FMI por la misma cifra en abril, solo compraron tiempo, sin resolver la falta de dólares genuinos en la economía.
Para Redrado, el incentivo para que el Gobierno acelere las correcciones no pasa por la presión externa, sino por la sustentabilidad social del programa económico, ya que la mitad de los argentinos queda fuera del modelo que solo beneficia al campo, la energía, la minería y la inteligencia artificial.
El ex presidente de la Comisión Nacional de Valores vaticinó "tranquilidad y estabilidad" hasta el 26 de octubre, aunque subrayó que “la clave es que el 27 se acuerde una agenda con gobernadores que tenga viabilidad y factibilidad de ejecución”.