La Ley Bases que fue aprobada en el Senado introdujo modificaciones clave que beneficiarán a los titulares de créditos hipotecarios sujetos al Impuesto a las Ganancias. Una de las modificaciones más relevantes dentro del dictamen del paquete fiscal es la actualización del límite de deducción por intereses de préstamos hipotecarios destinados a la adquisición o construcción de viviendas para uso personal, un valor que no había sido ajustado desde 2001.

Mientras, el Gobierno agiliza las negociaciones por la Ley Bases, en búsqueda de que se insista con el proyecto original cuando vuelva a ser tratada en Diputados.

Cómo impacta la Ley Bases en los créditos hipotecarios UVA: los 4 puntos clave

• Actualización del límite de deducción

Desde 2001, el límite de deducción por intereses de créditos hipotecarios se había fijado en $20.000, sin ningún ajuste a pesar de una inflación acumulada del 73.000%. La Ley Bases propone aumentar este límite a una cifra equivalente a la deducción por Ganancia No Imponible, estimada en $3.091.035 para 2024. Este cambio, de ser aprobado, supondría un incremento significativo en el beneficio fiscal para los contribuyentes.

 

• Impacto financiero para los contribuyentes

Sebastián Domínguez, socio de SDC Asesores Tributarios, destaca que esta medida incentivará a las personas a acceder a su primera vivienda o a mudarse a una residencia más espaciosa y cómoda. Según sus cálculos, una persona que tribute a una tasa del 35% y deduzca el monto completo de intereses podría lograr un ahorro máximo anual en impuesto a las ganancias de $1.081.862,25. Este beneficio fiscal representa una ayuda considerable para quienes están pagando créditos hipotecarios, facilitando la adquisición de viviendas y mejorando la calidad de vida de los contribuyentes.

• Ajustes periódicos del monto deducible

Además del aumento inicial, la Ley Bases establece que el monto deducible se ajustará en septiembre de 2024 según la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicado por el INDEC entre junio y agosto de ese año. Este mecanismo asegura que la deducción mantenga su valor real frente a la inflación.

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A partir de 2025, la actualización del monto deducible será semestral, realizándose en enero y julio de cada año, basándose en la variación del IPC del semestre calendario anterior. Esta actualización periódica permitirá que los beneficios fiscales se mantengan alineados con la inflación, ofreciendo una protección continua contra la erosión del poder adquisitivo.

• Flexibilidad para el Poder Ejecutivo

El paquete fiscal también otorga facultades al Poder Ejecutivo para incrementar los valores deducibles durante 2024 según su criterio. Esta flexibilidad permitirá ajustar los montos deducibles de manera ágil y adecuada, respondiendo a cambios económicos y necesidades emergentes.