El gasto en servicios públicos para un hogar promedio del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) tuvo un incremento que en 2024 triplicó al de la inflación general y en consecuencia pasó a tener una mayor proporción en el presupuesto familar.

Según el relevamiento que realiza periódicamente el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la Universidad de Buenos Aires, ese gasto ascendió en enero a $144.775 para el pago de los servicios de energía eléctrica, gas natural, agua corriente y transporte público, con un incremento del 3% mensual y 345% interanual.

Si bien aún no se dio a conocer el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de enero, as consultoras se prevén que será inferior al 3% de ajuste de la canasta de servicios públicos.

Pero la diferencia será mucho más marcada si se toman los últimos doce meses, para los que se espera una inflación cercana al 85%, cuatro veces inferior a la suba de la canasta de servicios públicos en el mismo lapso.

 

Sin reflejo en la inflación
 

Esa evolución desigual se debe a la eliminación de gran parte de los subsidios e implica un cambio en la composición de los gastos de una familia, que no están reflejados en la ponderación que usa el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) para calcular la inflación. 

Al respecto, el director del organismo, Marco Lavagna, señaló a mediados de 2024 que antes de que finalizara el año se daría a conocer la nueva metodología del IPC, decisión que fue postergada sin fecha precisa.

 

Cómo se compuso la suba de enero
 

El aumento de 3% en enero informado por IIEP obedeció a la variación de tres de los cuatro servicios de la canasta, ya que no hubo cambios en las tarifas de transporte público.

En ese sentido, la entidad desatacó los menores consumos de gas, que neutralizaron los aumentos del 2,5% en el cargo fijo y 2,2% en el variable; el incremento del 4% en el cargo fijo y 0,7% en el variable de la energía eléctrica, con aumentos en el consumo por cuestiones estaciones y, por último, los incrementos en los cuadros tarifarios de agua. 
“En síntesis, el aumento del 3% en la canasta de servicios lo explica un aumento de la energía eléctrica y del agua del 10,9% y 1% respectivamente que no llegan a compensarse por la caída en el gasto en gas natural del 0,9%”, explicó IIEP.

 

El detalle en doce meses

 

La desagregación del 345% interanual muestra que los gastos en transporte -que no aportaron nada en enero- fueron los más significativos del período, con un alza del 382% que representó 137 puntos porcentuales del incremento total de la canasta (39,7%).

El gasto en energía eléctrica aumentó 270% con una incidencia en el resultado global de 94 puntos porcentuales (27,2%), el del gas un 559%, pero con un aporte de 68 puntos (19,7%) mientras hubo un incremento del 321% para el agua, con 46 puntos porcentuales y una incidencia del 13,4%.

 

 

 

La cobertura de las tarifas
 

Los aumentos tarifarios aplicados desde principios de 2024 buscan reducir el gasto en subsidios, no solo por su impacto en el gasto público sino para que los valores pagados por los usuarios se aproximen a los costos de explotación, aunque por los resultados relevados por IIEP cabe concluir que la tarea aún está a mitad de camino.

Eso es así porque en enero, luego de todos los aumentos señalados, las tarifas pagadas alcanzan para cubrir el 53% de los costos “y, por lo tanto, el Estado se hace cargo del 47% restante”, remarcó el Instituto.

Pero ese 53% de promedio es dispar tanto en la discriminación por servicio como por la segmentación que se aplica en los casos de la energía eléctrica y el gas natural.

Como la canasta de servicios públicos del AMBA de enero representa el 11,7% del salario promedio registrado estimado del mes, una hipotética equiparación con los costos (es decir, la eliminación total de subsidios) sin que se registrasen cambios en los haberes, elevaría ese porcentaje al 22,1%.

 

Caso por caso
 

El único caso en el que la cobertura ya se completó es el del agua, ya que las tarifas de AySA cubren el 100% de los costos, según el relevamiento del IIEP.

En orden decreciente, la cobertura promedio ponderada del gas (teniendo en cuenta los diferentes niveles de segmentación) es del 55%, la de la energía eléctrica del 49% y la del y transporte del 31%.

 

Esos porcentajes dejan en evidencia la brecha acumulada en las últimas décadas entre las tarifas y los costos, en especial en el transporte público, que muestra la paradoja de ser el de mayor aumento relativo y, al mismo tiempo, el de menor cobertura.

Según IIEP, el costo técnico del pasaje de colectivo es de $1.314, más del triple de la tarifa promedio que pagan habitualmente los usuarios del servicio en el AMBA.