El Tesoro acortó plazos en las Letras y revirtió el resultado de la última licitación
El Ministerio de Economía obtuvo $95.000 millones en la colocación de deuda de este miércoles, pero más de la mitad se concentró en la Ledes que vence a finales de octubre, tras el mal paso de principios de mes
El Ministerio de Economía llevó adelante esta tarde una nueva licitación de Letras del Tesoro, con las que obtuvo unos $95.000 millones y de esta manera, quedó con un colchón de financiamiento neto para el mes a pesar de que en la última colocación sólo había renovado el 65%. El cambio de estrategia implementado para la operación de hoy dio resultado: se volvió a ofrecer una Ledes corta, que captó la mayoría de las ofertas y en la que finalmente se adjudicó más de la mitad del monto final.
En el debut de Rafael Brigo como secretario de Finanzas, el Tesoro logró sortear el mal paso de lo que había sido la última emisión de su predecesor, Mariano Sardi, en la que sólo se habían puesto a disposición de los inversores títulos a 2022 y 2023. En esa operación, el Palacio de Hacienda quedó unos $80.000 millones por debajo de los vencimientos de esa semana.
El resultado de este miércoles dejó al equipo de Martín Guzmán con un fondeo neto mensual en torno a los $9.000 millones. Como hasta el 31 no hay vencimientos de deuda en pesos, el porcentaje de renovación del mes es superior al 105%. El último día de agosto, se deberán cancelar unos $93.000 millones, aunque antes habrá otra licitación para captar más pesos del mercado y ayudar a hacer frente a esa obligación sin la necesidad de recurrir al Banco Central, que en las últimas semanas aceleró sus giros al Tesoro.
De acuerdo al Presupuesto de este año, la emisión monetaria debe financiar el 60% de las necesidades y el 40% debe provenir de las diversas fuentes de deuda. Actualmente el ratio está cerca del 64%/36%, “bastante alineado” con el objetivo, evalúan en Economía.
Lo concreto es que el mercado presentó ofertas por un monto nominal de $112.145 millones, de los que se adjudicaron $95.000 millones en términos efectivos. La Ledes con vencimiento en octubre concentró $49.309 millones del total adjudicado, es decir, más de la mitad, a una tasa del 38% anual. La que debe cancelarse a fin de diciembre juntó $7.260 millones (ofrecieron $12.600 millones), y la que expira el 31 de enero, $10.500 millones.
En tanto, con la Lecer a fin de marzo de 2022 al 2,7% se captaron $9.066 millones y con el bono a tasa fija a mayo, $18.680 millones, el segundo instrumento más demandado, y que pueden utilizar los bancos para integrar encajes. En estos dos casos, casi sin dejar afuera fondos frescos.
Cambio de estrategiaPara revertir el resultado de la anterior colocación, en Hacienda realizaron un cambio de estrategia, aunque desdramatizan la variabilidad de los fondos obtenidos en cada operación: “ni somos los peores cuando no renovamos todos los vencimientos ni los mejores cuando los superamos”, resumen en el equipo de Guzmán.
La movida no pasó solamente por el menú ofrecido a los operadores, que reclamaban el regreso de instrumentos cortos, y a tasa fija (donde se colocó el 90% del total). También hubo un trabajo en conjunto con el Banco Central, que la semana pasada comenzó a operar con futuros de Ledes en el Mercado Abierto Electrónico, al que ahora se sumó Matba-Rofex. El objetivo es reducir de estos nuevos instrumentos es la volatilidad de precios de las Letras y garantizar una rentabilidad determinada a sus tenedores, de manera de volcar hacia allí recursos en manos de los Fondos Comunes de Inversión.
En ese sentido, la CNV dispuso también hoy la creación de un nuevo régimen para FCI, que podrán integrarse en un 55% con títulos públicos bajo suscripción primaria.
A su vez, mañana se darán a conocer los primeros aspirantes a "creadores de mercado", anticiparon fuentes de Economía. Se trata de un programa que busca ampliar la oferta de títulos al momento de su lanzamiento, para favorecer la participación de minoristas, que hoy ocupan un lugar menor en el financiamiento.
Este último punto se vio reflejado en que de las 668 ofertas recibidas en la licitación de deuda, 367 provinieron del tramo "no competitivo", aunque por apenas $100 millones.