La brecha con el blue saltó arriba del 120% tras la devaluación
La brecha cambiaria con el dólar ilegal se elevó al 123% porque se recalentó la demanda en busca de cobertura
El dólar blue cerró este miércoles con una suba de treinta pesos hasta $780 para la venta en la City porteña, aunque llegó a arañar los $800 en horas del mediodía. De esta forma, la brecha con el dólar mayorista –que desde el lunes el Gobierno sostiene centavos debajo de los $350- se amplió al 123%, una cifra incluso mayor al 104,8% previo a las PASO. Así, la compresión de la distancia entre los tipos de cambio que propició la devaluación del 22% duró solamente lunes y martes.
Similar tendencia se vio con el contado con liquidación (CCL) que subió 3% hasta $723 en el mercado bursátil, lo que dejó a la brecha en 106,6%, a escasos puntos del 109% previo a los comicios. Es que, desde el triunfo de Javier Milei, el blue avanzó $175 (28,9%), el contado con liquidación $122 (20,3%). El dólar MEP, en tanto, avanzó $111,5 (20,7%) en los últimos tres días y quedó en $651,4, 86,1% por arriba del dólar oficial. En esta trayectoria, cabe destacar una fuerte aceleración el martes hasta un pico de $697,3 que se desarmó el mismo día en parte por la baja del impuesto PAIS sobre el “dólar Qatar” que redujo la presión sobre el MEP y otra parte este miércoles con una caída adicional del 2,4%. Aquí también, la brecha también quedó por encima del 85,7% del viernes último.
La fuerte suba de todos los dólares paralelos no solo amplió las brechas cambiarias por encima de los niveles ya exacerbados del viernes pasado por la aceleración del crawling peg que empezó a fines de julio, sino que se empezó a sentir en los precios de aquellos bienes tecnológicos que siguen a los dólares paralelos.
En este sentido, las consultoras ya proyectan cifras de inflación de dos dígitos para agosto y septiembre: “Entendemos que la mitad de la economía ya funcionaba al tipo de cambio libre, pero buena parte de la canasta básica estaba aún a tipo de cambio oficial. Con la inercia a la que venían los precios y asumiendo un del 50%, estimamos que la inflación irá a niveles del 14% en agosto y 12% en septiembre. Son valores que tomamos como piso, porque la inestabilidad asociada al desenlace electoral no terminó”, detalló el último reporte de Lcg.
En términos de competitividad cambiaria, en tanto el salto devaluatorio del lunes le permitió al Banco Central acumular compras por USD463 millones en la semana, pero algunos indicadores de competitividad ya dan señales de la dificultad por sostener el margen obtenido con el salto del 22%. En efecto, el Índice de Tipo de Cambio Real Multilateral (ITCRM) que calcula el BCRA mejoró un 20% y solo en tres días esa mejora se redujo al 19% por la evolución de las cotizaciones de las monedas de los principales socios comerciales de la Argentina y por el impacto de la inflación local. En tanto el índice de competitividad cambiaria bilateral con Brasil se redujo a un ritmo ligeramente mayor.
"El pass through es muy veloz. Lo veo en los precios que bajo todos los días", dijo a BAE Negocios Camilo Tiscornia, economista de C&T Asociados, y agregó: "Que el IPC haya sido superior a los precios mayoristas no es señal de que los márgenes empresarios sean altos y permitan absorber los aumentos de precios, sino de que subieron respecto de los meses previos. Pero más allá de eso, en una economía cerrada como esta, no hay nada que te impida aumentar el precio".
“Según nuestras estimaciones, la inflación de agosto tiene un piso de 10%, mientras que la de septiembre de 15% por el arrastre que deja la devaluación. Aun no hay relevamientos de alta frecuencia que hayan medido el impacto, pero puede vislumbrarse que ante la falta de anclas el passthrough (el pase de la devaluación a precios) será elevadísimo y en un corto período de tiempo. Con estos niveles de inflación, la tasa real quedaría en terreno muy negativo por más que el BCRA la haya incrementado 21 pp a 118% de TNA o 209,4% de TEA”, señalaron PPI.
“Específicamente, la tasa real sería de -4,6% mensual o -44% anual, por lo que la demanda de dinero seguiría contrayéndose y, en consecuencia, retroalimentando la inflación. Asimismo, la incertidumbre electoral hasta octubre podría profundizar esta caída con una brecha que apenas un día post devaluación ya está nuevamente en 100%, dado que el CCL siguió escalando ayer de $658 a $700 (6,4% diario y 17% desde el cierre del viernes). Al mantenerse el cepo y el exceso de pesos ser mayúsculo, no debe descartarse que la brecha trepe nuevamente a niveles superiores a 130% y reavive los temores de devaluación”, agregaron desde la agencia bursátil.