La industria estuvo varios meses del 2020 operando en niveles históricamente bajos. Por eso, pese a la recuperación lograda a partir de mayo, el año terminó con una contracción acumulada de 7,6%. Bastante menos que la de al menos 10% que se espera para el PBI. Pero eso sí: esa baja se montó sobre las de los dos años previos y, en total, el sector fabril sufrió una baja de 17,7% entre 2018 y 2020. En diciembre la industria ya está produciendo más que antes de la pandemia pero aun le queda mucho camino por recorrer para recuperar los niveles del 2017.

En términos de participación sectorial sobre el total del PBI no hubo contracción, por lo cual no se puede hablar de desindustrialización en el mismo período. Eso principalmente porque a lo largo del 2020 la industria recuperó el terreno perdido durante el período de Cambiemos en el gobierno: al último trimestre del 2015 la participación del sector fabril sobre el total de la producción era de 14,3%, a fines del 2019 había caído a 13,3%, luego de tocar un piso de 12,7% en 2017, y al tercer trimestre del 2020 había vuelto a 14,7%.

Dejando de lado el traspié de 2016, cuando según el Indec cayó 4,6%, el primer mazazo de los últimos tiempos la industria lo recibió durante el 2018, de la mano de la devaluación que arrancó en abril de ese año y que afectó a los ingresos fijos y al consumo, en primera instancia. Así, durante el 2018, la industria cayó 5,1%.

 

Luego, en 2019 no hubo recuperación, así como tampoco la hubo por los lados de la inestabilidad cambiaria y del poder adquisitivo de los salarios. Con el año electoral como trasfondo, por el contrario, la dinámica empeoró y la contracción fue de 6,3%.

En el 2020, con la nueva estabilidad cambiaria a la sombra del cepo, la cosa había arrancado bien. En diciembre, enero y febrero el sector fabril logró hilar tres meses consecutivos de recuperación, algo que no ocurría desde mediados del 2017. Y luego llegó marzo. La pandemia. La cuarentena. El desplome de un tercio de la producción en solo dos meses (la caída fue de 31,5% entre marzo y abril). Si bien a partir de mayo comenzó el rebote, recién en noviembre se logró superar el nivel prepandémico. Y por eso, a lo largo del año, la baja terminó siendo de 7,6% respecto al 2019.

La dinámica hace acordar a la que ocurrió entre 1998 y 2002, aunque en aquel entonces la baja fue más sostenida en el tiempo y de una magnitud superior. Entre esos años, con cuatro mermas consecutivas, la producción industrial cayó 22,4%.

¿El 2021 será el año del rebote?

En diciembre, la producción industrial creció 0,9% respecto a noviembre, quedó 2,5% por encima del febrero prepandémico y 4,9% arriba del cierre del 2019. Pero todavía 10,3% por debajo de diciembre del 2017.

El 2021, se espera, sería el año en el que racha se cortaría y se lograría cierto rebote. Desde la consultora ACM señalaron al respecto: “La industria consolidará su recuperación en los próximos meses, una vez que el panorama macroeconómico se estabilice y el fin de la pandemia se encuentre próximo. Los principales drivers favorables en el futuro serían el bajo nivel de los costos en dólares, tasas de interés reales bajas, un renovado impulso a la obra pública y los créditos blandos a las pyme que se plantean desde el Gobierno, como motor de la recuperación post pandemia. Los controles cambiarios podrían impulsar la demanda de bienes durables, como los autos”.

Los números que cerraron con los datos industriales del 2020 fueron publicados por el Indec a través del Índice de Producción Industrial (IPI) manufacturero de diciembre.

Desde el Ministerio de Economía destacaron: "Crecieron de forma interanual 11 de los 16 sectores, la mayor difusión del crecimiento desde mayo de 2018. Entre los sectores que cayeron, todos desaceleraron su caída menos uno. Se destacaron las subas de Vehículos automotores (40,6% interanual), Maquinaria y Equipo (35,3% interanual), Otros equipos, aparatos e instrumentos (27,6% interanual) y Productos minerales no metálicos (26,5% interanual)".

Y agregaron: "El resto de los sectores en alza aceleró el crecimiento, como Caucho y plástico (12,0% interanual vs. 5,8% en noviembre), Metálicas Básicas (10,5% interanual vs. 2,3% en noviembre), Químicos (7,7% interanual vs. 2,3% en noviembre), entre otros. Entre los sectores que cayeron, todos desaceleraron su tasa de caída, excepto Alimentos y bebidas, que cayó 6,6% interanual luego de crecer 4,3% interanual en noviembre. La caída se explica porque en el último mes del año estuvo afectado por el paro de aceiteros, lo que provocó una baja de 71% interanual en la molienda de oleaginosas".