La semana empezó con un respiro en la sangría pero privados ya estiman las reservas líquidas debajo de USD4.000 millones
Luego de que Economía desmintiera las versiones de un ajuste al cepo, el Central pudo evitar la venta de divisas. En sus arcas quedan USD43.000 millones brutos pero sólo una pequeña parte puede usarse para intervenir. ¿Pueden aumentar las restricciones al dólar ahorro?
Luego de que Economía le pusiera un freno a las versiones acerca de un nuevo ajuste al cepo cambiario para eliminar el cupo de USD200 mensuales para atesoramiento, alimentadas por declaraciones del presidente Alberto Fernández, la semana comenzó con un respiro. La sangría de dólares para abastecer demanda privada, que en lo que va de agosto fue de USD550 millones, se detuvo: tras el feriado, el martes el Banco Central logró comprar USD30 millones, según fuentes del mercado, y el miércoles tuvo un saldo neutro. Sin embargo, los analistas esperan que la volatilidad continúe a pesar del acuerdo con los bonistas para el canje de deuda externa y advierten sobre la escasez de divisas. Algunas consultoras estiman que las reservas netas líquidas ya se ubican por debajo de los USD4.000 millones.
Los cálculos sobre las divisas disponibles en las arcas del BCRA varían según los componentes que se contabilicen. Por lo pronto, las reservas brutas poseen apenas algo más de USD43.000 millones. Las netas, que excluyen el recién renovado swap con China, los encajes de los depósitos bancarios en dólares y otros préstamos, están abajo de los USD10.000 millones. ACM las estima en USD9.988 millones (al 13 de agosto); LCG, en USD9.700 millones; Consultora Ledesma, en USD8.200 millones; Portfolio Personal, en USD7.200 millones.
No obstante, si se toman sólo las reservas netas líquidas, es decir, las que pueden utilizarse para intervenir inmediatamente en la plaza cambiaria, el número se ubica muy por debajo. Según un informe de ACM, en USD3.891 millones. Esto ocurre al descontar de las reservas netas las posiciones en oro (USD3.864 millones) y los que queda del multimillonario préstamo del FMI (USD2.233 millones).
Así, la consultora consideró como probable que haya nuevas restricciones al dólar ahorro, cuya demanda se incrementó en los últimos meses y en julio unas 4 millones de personas demandaron billetes verdes. “En caso de continuar la dinámica actual estimamos que podría existir un drenaje superior a USD4.000 millones por esta vía durante el segundo semestre, lo cual se combinaría con una menor liquidación de granos por cuestiones estacionales y una mayor demanda de dólares para la importación producto de la relativa recuperación en los niveles de producción”, señaló ACM.
El director de Epyca, Martín Kalos, coincidió en que la volatilidad continuará más allá de que se resuelva la reestructuración. “Hay una incertidumbre sin precedentes a raíz de la pandemia. Que el Gobierno haya eliminado una fuente, la deuda, es importante pero el resto de la incertidumbre sigue ahí. Entonces, va a seguir habiendo brecha y volatilidad. Cuando se vaya estabilizando el resto, va ir reduciéndose la volatilidad. Todavía falta un horizonte de salida de la pandemia y de las políticas de crecimiento, inflación e ingreso de divisas”, sostuvo.
Sin embargo, consideró que “sería un error cortar los USD200 porque los compradores van a seguir buscando el activo seguro en el mercado paralelo y se va a ampliar la brecha”. Hoy, pese a las microdevaluaciones que convalida el BCRA en el tipo de cambio oficial, el contado con liqui (cotización implícita en operaciones bursátiles) ya se ubica 79% arriba del dólar mayorista. “Esto alentaría aún más la incertidumbre. Ampliar la brecha puede generar expectativas de devaluación mayores”, agregó Kalos.
Una lectura similar del riesgo de endurecer el cepo fue la que llevó a Martín Guzmán a descartar, al menos por ahora, esa medida. Luego de que el Presidente dijera que le preocupaba la gran demanda de dólar ahorro, crecieron las versiones al respecto durante el fin de semana. Fuentes de Economía salieron, entonces, a frenarlas: "No sólo que no se piensa en restricciones, sino que se aguarda que, luego de las operaciones de pasivos que se realizarán durante este mes, va a haber menos presión sobre el frente cambiario".
El ministro confía en que parte de las tensiones en el dólar Bolsa cederán una vez que concluya el canje local ya que muchos inversores se volcaron a comprar bonos en dólares para aprovechar la pesificación opcional que incluye esta reestructuración y hacerse allí de títulos en pesos más largos atados a la inflación (Boncer 2026 y 2028) que hoy ofrecen jugosos retornos.