Las últimas lluvias trajeron alivio para los cultivos. Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), la siembra de maíz ya cubrió el 75% de las 6,3 millones de hectáreas proyectadas para la presente campaña, mientras que en el caso de la soja, ya se ubica sobre el 80% de las 17,7 millones de hectáreas previstas para este ciclo.

Como dato a tener en cuenta sobre el cultivo de soja, durante los últimos siete días se han incorporado más de 1,5 millón de hectáreas en todo el mapa agrícola nacional. Por el lado del maíz, las últimas precipitaciones mejoraron -de manera parcial- el estado de aquellos lotes con siembras tempranas que se encuentran en etapa de definición de rindes.

El girasol, de acuerdo al último informe sobre el estado de cultivos de la BCBA, se encuentra en casi un 94% de condición entre normal y excelente, y en los últimos días comenzaron las tareas de cosecha en establecimientos ubicados en NEA y centro-norte de Santa Fe. Hasta el momento, los rindes de estos primeros lotes se ubican por encima de los promedios históricos.

De todas maneras, desde la entidad advirtieron que pese a estos progresos, aún se registra una demora interanual de 4,3 puntos porcentuales, a causa del déficit hídrico que afecta las regiones del NOA, sur de La Pampa, sudeste y sudoeste de Buenos Aires. En trigo, el avance de cosecha alcanza a casi el 90% del área proyectada, con un rendimiento promedio de 2.830 kilos por hectárea.

Por su parte, desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) señalaron que el 90% de la zona núcleo finalizó la primavera con registros de lluvias por debajo de los promedios históricos. "El verano arranca con escasa humedad en el suelo y enciende una alerta a la cosecha gruesa", advirtieron desde la entidad bursátil rosarina. En este sentido, agregaron que sobre el norte de Buenos Aires hacen falta entre 120 y 140 milímetros para una humedad de suelo óptima.