Lula quiere firmar acuerdo con UE y abre negociación en Mercosur
A la presión ejercida por la UE, se sumó el interés de Brasil para que el acuerdo se firme a mediados de año
En lo que representa claramente otro escenario para el Mercosur , el presidente de Brasil, Luis Inacio Lula da Silva, y representantes de la Unión Europea dejaron en claro que el tratado deberá firmarse en forma definitiva en este semestre.
Para la Argentina, según fuentes oficiales, “no es un mapa muy alentador. La influencia que representa Lula, sumado a los países más fuertes de la UE nos deja sin margen para trabajar en revisar punto por punto”.
En este momento, la UE está consultando a Lula por qué no avanzan y las fuentes indicaron que “el Pacto Verde Europeo pretende cambiar la letra de lo firmado, lo cual nos afecta, suma exigencias en materia agrícola”.
“Las autoridades no quieren matices de uno y otro lado. El Pacto Verde va a ser una gran medida paraarancelaria”, afirmaron desde el Gobierno. Representantes de la Unión Europea señalaron –off the record- que se debe acelerar la puesta en marcha del acuerdo con el Mercosur, cuyas últimas negociaciones fueron hace meses.
“El acuerdo quedó estancado y por eso, esperamos del presidente Lula que pueda ayudar”, afirman a BAE Negocios desde el bloque europeo. Un tema cruza todas las negociaciones: la deforestación de la Amazonia, donde por ejemplo Francia se puso al frente en el sentido de suspender el diálogo si Brasil sigue sin cuidar “el pulmón verde” del mundo.
Fuentes diplomáticas del Mercosur señalaron que “también la Unión Europea tiene que enviar al Mercosur sus exigencias medioambientales en torno al Amazonas”. La UE está internamente dividida, lo cual dificulta más aún la cohesión en ambos bloques.
Asimismo, quesos y vinos de la Unión Europea, que tienen su correlato en el Mercosur luego de siglos, están trabando desde hace más de un año las negociaciones para la firma del tratado entre ambos bloques. Fuentes del Mercosur señalaron que habrá un contacto para intentar avanzar en el denominado segmento de la “indicaciones geográficas” y otros ejes. “Existe mucho interés europeo para que -de ahora en adelante- el bloque sudamericano no pueda copiar los respectivos nombres”, apuntaron las fuentes, “lo que motivó el rechazo del Mercosur”.
De aprobarse en los parlamentos de los dos bloques, el acuerdo comercial entre la Unión Europea y el grupo Mercosur verá 357 productos agroalimentarios de la UE reconocidos en los cuatro países sudamericanos, mientras que otros 220 productos del bloque americano serán reconocidos por los países europeos.
“El acuerdo representa el mayor jamás realizado sobre las IG por la UE, superando, por ejemplo, a las 340 IG reconocidas por México, 200 por Japón y 158 bajo el Acuerdo Económico y Comercial Integral UE-Canadá (CETA)”, dicen en el Mercosur graficando la importancia.