Supermercados provinciales lanzan canasta económica
En las próximas semanas, las cámaras CAS y FASA darán a conocer una lista de productos con precios "protegidos", con el aval de sus proveedores. El Gobierno aclaró que no interviene pero pidió que exista un acuerdo; las cadenas rechazaron estas negociaciones
Sin la mediación del Gobierno, los supermercados provinciales nucleados en las cámaras CAS y FASA lanzarán una canasta de alrededor de veinte productos, que sostendrán durante 90 días con ajustes por debajo de la inflación.
Por el contrario, las grandes cadenas de hipermercados no ven posible ofrecer dicha canasta, por los diferentes aumentos sobre sus costos, informaron fuentes del supermercadismo a BAE Negocios.
Desde la Secretaría de Comercio e Industria expresaron a este medio que "esto es el Modelo Chango Más que lanzó la Canasta Protegida, lo producen ellos, lo difunden ellos". "Es una demostración de parte del sector privado de entender la gravedad del momento que le permitiría fidelizar clientes, ampliar la participación en el mercado y generar mejores condiciones de competencia en el sector. Nuestro rol es promover este tipo de políticas, gestionar con proveedores y facilitar los acuerdos", manifestaron en el Ejecutivo.
"No vamos a hacer un programa de gobierno con poder de policía, porque quedó demostrado que los controles de precios no sirven. Llevamos 17 años con controles de precios y vimos que no funcionaron", remataron.
El subsecretario de Defensa del Consumidor y Lealtad Comercial, a cargo del comercio interior, Fernando Blanco Muiño, recibió a los presidentes de la Cámara Argentina de Supermercados (CAS), Ricardo Zorzón, y de la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA), Víctor Palpacelli, junto a Ricardo Cáceres y Marcelo Schvarzstein, directivos de ambas entidades.
En un comunicado, ambas entidades informaron que "los representantes del supermercadismo argentino transmitieron el apoyo y colaboración del sector para superar la difícil situación que está atravesando el país, privilegiando el compromiso de mantener, -en la medida de sus posibilidades- las fuentes de trabajo".
"Luego de describir la situación actual del mercado, caracterizada por aumentos generalizados de precios y dificultades de abastecimiento, se analizó la problemática de diversos sectores en particular y distintas posibilidades de actuación para alcanzar soluciones específicas en cada caso", señala la nota.
En ese marco, Blanco Muiño planteó la forma en que funcionará la Secretaría de Comercio en la nueva administración, descartando totalmente la intervención del organismo en la fijación de precios o en el establecimiento de controles sobre las empresas del sector.