Tras el nuevo envío del FMI, la meta de reservas quedó a mitad de camino
Siguen negativas y Brasil ofreció comerciar en yuanes, a lo que Massa aceptó para cuidar los dólares de las reservas
Con la llegada del desembolso de USD7.500 millones del FMI, Argentina recompuso la mitad del rojo de las reservas netas y quedó a medio de camino en el cumplimiento de la meta de reservas, aunque las proyecciones son negativas hacia adelante una vez pasada la devolución de los préstamos de Qatar y del CAF. El BCRA viene comprando dólares en el MULC, pero tiene dificultades para convertirlos en acumulación de reservas, por lo cual persisten las restricciones a las importaciones. Para saltearlas y poder seguir vendiéndole a la Argentina, Brasil anunció que está dispuesto a aceptar yuanes en el comercio bilateral y no abultar más la deuda comercial argentina, que ya se ubica en torno a los USD37.000 millones. Sergio Massa anticipó que en una semana firmará en Brasilia el acuerdo para comenzar a comerciar en la moneda china.
El ministro de Economía de Brasil, Fernando Haddad, afirmó este miércoles, en Sudáfrica, que le propuso a la Argentina aceptarle yuanes como moneda de pago de modo de desdolarizar el comercio bilateral. "Enviamos al Gobierno argentino una propuesta de garantía en yuanes para las exportaciones brasileñas, para los exportadores brasileños es una cosa buena, será una buena noticia si Argentina acepta", dijo en una conferencia de prensa brindada en Johannesburgo, donde se lleva a cabo la Cumbre de los Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).
Horas más tarde, Sergio Massa desde Washington confirmó que el lunes 28 viajará a Brasilia a reunirse con Haddad y con Lula da Silva para "poner en marcha este mecanismo de refuerzo al apoyo al financiamiento de importaciones de Brasil a la Argentina para aliviar aún más el procedimiento de utilización de las reservas en un momento en que tenemos que cuidarlas", en palabras del ministro de Economía.
De acuerdo a Haddad, el Banco do Brasil está en condiciones de convertir directamente a reales los yuanes que los importadores le compren al BCRA, para pagarles a sus proveedores brasileños, por un monto inicial equiparable a entre los USD100 y los USD140 millones. Se trata de una cifra menor, del orden del 10% de las importaciones mensuales desde Brasil. En 2022, por ejemplo, las compras externas sumaron un total de USD16.030 millones. De esta forma, Argentina se consolidó como el tercer socio comercial de Brasil detrás de China y Estados Unidos, pero con un importante componente industrial, a diferencia de las exportaciones hacia los dos primeros.
Tras la firma, el acuerdo de comercio en yuanes podría garantizarle a la industria insumos industriales para las firmas de alto grado de integración de partes dentro del Mercosur. Para Brasil, en tanto, es una forma de asegurar la continuidad de sus exportaciones sin incrementar el riesgo de impago, habida cuenta del crecimiento permanente de la deuda comercial de las firmas nacionales con sus proveedores extranjeros. En particular, para un grupo de 200 empresas del país vecino que venden en Argentina, porque quedarían exentos de la espera para la aprobación de las SIRA y la cancelación de las operaciones a tipo de cambio oficial.
Deuda comercial récord“Los exportadores de Brasil pueden tener algún flujo de ventas de sus productos con 100% de garantía. Para Brasil, no hay problema, porque la tasa de cambio se hará con el yuan por real y esto también le asegura al Tesoro Nacional que no hay riesgo de incumplimiento. Una garantía que el Tesoro consideró adecuada y que el Banco do Brasil aceptó, tal como se presentó", aseguró Haddad.
En efecto, uno de los reclamos de la Federación de Industrias del Estado de San Pablo desde comienzos de año se centraba en la creación de políticas de comercio exterior para dejar de perder ventas en Argentina a manos de China. Es que precisamente con los dos swaps por un total de USD10.000 millones de libre disponibilidad, China le prestó al BCRA para transitar la sequía de 2023 una cifra equivalente a todo el déficit comercial bilateral con China de 2022.
Por eso, Haddad ya había propuesto a principios de 2023 avanzar en un acuerdo entre los bancos centrales de ambos países para el intercambio bilateral garantizado por un fideicomiso en pesos y en reales que diera origen a una unidad de cuenta común con efectos similares al swap con China sobre el comercio bilateral; pero por la inestabilidad del peso, este proyecto se estancó. La misma suerte corrió la iniciativa de que el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) brasileño, el mayor banco de fomento de las Américas, les financiara a las industrias de Brasil sus exportaciones con tasas subsidiadas a la Argentina.
En este sentido, Lula también resolvió a fines de mayo que Brasil apadrinara a la Argentina para que ingrese a los Brics. De concretarse el ingreso este jueves, con un aporte de capital inicial menor poder acceder al financiamiento del banco de los Brics, el Nuevo Banco de Desarrollo (NDB por sus siglas en inglés) que preside la ex presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.
El reclamo de la industria paulista obedece a la exposición creciente a deuda postergada de sus contrapartes argentinas. Es que, actualmente la deuda externa comercial argentina en el segund trimestre aumentó USD 2.700 millones, el equivalente a dos meses de importaciones hasta un nuevo récord y de este, el 57% es intrafirma. "La deuda comercial por importaciones de bienes es la más elevada de la historia argentina (incluso medida en moneda constante)", advirtió la consultora Ecolatina. De acuerdo a sus cálculos, hasta marzo, este pasivo ascendía a USD 34.300 millones y en el segundo trimestre se acrecentó a USD37.000 millones.
Este monto presiona sobre la recomposición de las reservas ya que las firmas buscarán devolverlo en la medida en que se liberen las restricciones al MULC. "El elevado stock representará una carga para el próximo gobierno, dado que constituye una demanda de divisas reprimida. Este factor será una de las claves a considerar al momento de resolver si el desarme del cepo cambiario será más rápido o gradual en el tiempo" aclararon.