Las empresas buscan cada vez más candidatos con habilidades blandas que les permitan adaptarse a los desafíos del mundo laboral actual. Según un informe de la consultora Randstad, la flexibilidad, la comunicación efectiva y la autonomía se encuentran entre las nueve competencias más valoradas a la hora de contratar talento.

El estudio, elaborado por especialistas en reclutamiento y gestión del talento, destacó la importancia de las habilidades humanas frente al avance de la inteligencia artificial y la automatización. En un contexto donde la vida útil del conocimiento técnico es cada vez más corta, las organizaciones priorizan perfiles con capacidad de adaptación, resolución de problemas y liderazgo.

Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina, Chile y Uruguay, explicó: “Si bien las habilidades técnicas seguirán siendo importantes en los procesos de selección, las empresas cada vez valoran más el potencial de desarrollo y el bagaje de habilidades blandas de los candidatos”.

 

Las 9 soft skills que te convertirán en el candidato ideal

El análisis de Randstad identificó las siguientes habilidades como las más buscadas por los reclutadores:

 

• Aprendizaje continuo: La capacidad de adquirir nuevos conocimientos y adaptarse a un entorno en constante cambio es una ventaja competitiva clave.

 

• Flexibilidad: Las empresas buscan candidatos capaces de adaptarse a cambios e imprevistos con rapidez.

 

• Comunicación efectiva y empatía: La habilidad para expresar ideas con claridad, tanto de forma escrita como verbal, es fundamental en un entorno donde predominan los modelos híbridos de trabajo.

 

• Trabajo en equipo y colaboración digital: La gestión de proyectos en equipos diversos y deslocalizados requiere habilidades de cooperación en entornos digitales.

 

• Creatividad e innovación: La capacidad de pensar “fuera de la caja” y proponer soluciones novedosas es clave para el crecimiento organizacional.

 

• Gestión del tiempo y autonomía: Con el trabajo híbrido consolidado, las empresas valoran la capacidad de organizar tareas de manera eficiente sin una supervisión constante.

 

• Capacidad resolutiva: Resolver problemas con rapidez y en línea con los objetivos organizacionales es una competencia esencial.

 

• Pensamiento analítico: Más allá del análisis de datos, las empresas buscan profesionales que sepan interpretar información y tomar decisiones fundamentadas.

 

• Liderazgo: Motivar y guiar equipos en entornos cambiantes es una habilidad valorada en todos los niveles organizacionales.

 

Ávila concluyó: “En un mercado laboral marcado por la escasez de talento, desarrollar y fortalecer estas habilidades es clave para mejorar la empleabilidad y mantenerse relevante ante las demandas cambiantes de las empresas”.