Luis Miguel sigue siendo el rey. Ya tiene el récord de mayor venta de entradas en 24 horas, y ahora se convirtió en el artista que más presentaciones acumula en el Movistar Arena, el lugar elegido para su regreso a la Argentina. 

El Sol de México vuelve al país con su Tour 2023 y se presentará el 3, 4, 6, 8, 9, 12, 15, 16, 17 y 18 de agosto en la Ciudad de Buenos Aires, su primera parada en una gira que lo llevará también por Chile, Estados Unidos y México, si es que no agrega más destinos. 

 

Con más de 100.000 entradas vendidas en un día para sus primeros nueve shows, también fue la persona que más rápido agotó los eventos en el estadio.

Según los organizadores del evento, la capacidad del lugar es de aproximadamente 15.000 personas, por lo que en total serán alrededor de 150.000 los seguidores que disfrutarán a Luismi en vivo, lo que promete 10 noches para la historia. 

Teniendo en cuenta que la capacidad en el Estadio Vélez es de alrededor de 50.000 personas y en el Campo Argentino de Polo —venue de su última presentación—, es de 30.000, la nueva visita del mexicano a la Argentina podría ser la más numerosa de su carrera en el país. 

El vínculo de Luis Miguel con Argentina

Luis Miguel parece argentino. Su vínculo con el país es tan estrecho que su éxito es indiscutido. Sus álbumes como Romance y México en la Piel consiguieron certificados de platino y diamante por las altas ventas que logró en Argentina. 

Su base de fans es muy fuerte, ya que despierta grandes pasiones en el público argentino. El intérprete de "La incondicional" llenó todos los estadios en los que tocó no solo en Buenos Aires, sino también en Rosario, Mendoza y Córdoba. 

Su serie de Netflix fue una de las más vistas en Argentina, especialmente la primera temporada. Atrapó por su historia y lo conocieron personas más jóvenes que no sabían mucho de él.

Por eso sus exitosos recitales no son casuales. Luismi siempre estuvo muy presente en Argentina. 

La nostalgia y los recitales, una combinación explosiva

Dicen que "todo vuelve" y la música no es la excepción. Estamos en un momento en que artistas que fueron furor en los 80, 90 y hasta 2000 tienen otro auge de popularidad en la actualidad. Motorizados por grandes movimientos de marketing, como el caso de Fito Páez, con su nueva serie de Netflix y sus últimos conciertos en Vélez y el Movistar Arena, su éxito es impulsado por la nostalgia.

No porque esos cantantes no hayan creado material nuevo; muchos artistas de renombre siguieron sacando sencillos o discos en los últimos años, como Luis Miguel, que en 2017 lanzó ¡MÉXICO Por Siempre!, una hermosa selección de icónicos temas de su país. Pero los grandes éxitos siempre serán los grandes éxitos. 

 

Quizás la nostalgia también se debe a la homogeneidad de hoy en la industria: hay mucha música que suena toda igual entre sí y se tiende a volver a aquello que fue único, y que a la vez marcó momentos clave en las vidas del público. 

El fenómeno se completa con el furor por los recitales. La pandemia nos dejó una sensación no solo de encierro, sino también una necesidad de estar presente en los momentos importantes. Y por supuesto, la necesidad de no perderse eso que tantas personas van a vivir, con fotos y videos en las redes sociales: poder decir "Yo también estuve ahí". 

Pero si Luis Miguel todavía está activo, ¿por qué no aprovecharlo? Su música es parte de nuestra historia, es un clásico que trasciende generaciones, y siempre mantuvo su vínculo con el país. El Sol de México sigue siendo el rey, también en Argentina.