Globos de Oro: el regreso del cine, el retroceso de las plataformas
La entrega de los Globos de Oro, más allá de las sorpreas o los olvidos que siempre ocurren, mostraron algo que debe tenerse en cuenta de aquí al futuro: la poca presencia en los galardones de las plataformas. Un regreso del audiovisual en salas que puede marcar el sector de aquí en adelante
Todos saben que el domingo se entregaron los Globos de Oro, premios cuya relevancia (después de que la Asociación de la Prensa Extranjera en Hollywood fuera inundada de escándalos) es más publicitaria que estética. OK, no vamos a discurir eso. Hay protestas porque Scorsese no ganó nada, porque Barbie perdió como comedia y etcéteras. No hay quejas por los cinco premios para Oppenheimer (Mejor Drama, Mejor dirección, Mejor actor -Cillian Murphy-, Mejor actor de reparto -Robert Downey Jr.- y Mejor música). Sí por la ausencia absoluta de gracia del host Jo Koy o porque el megahit de Margot Robbie-Greta Gerwig no tuvo más reconocimiento que canción y el recién inventado "logro en taquilla". Lo de siempre, pero nadie dijo lo esencial de estos premios.
Lo "esencial": ¿dónde están las plataformas más allá del apartado televisivo de los premios? Después de años en los que Netflix, HBO o Apple parecían mandar en el rubro gran pantalla, salvo por la esquivada Los asesinos de la luna, hubo poquísima representación de quienes, hoy, parecen mandar en el audiovisual. De hecho, uno de los premios importantes (Mejor guión) fue para una producción cinematográfica francesa (la ganadora de Cannes Anatomía de una caída, que también fue la mejor película extranjera).
La respuesta: incluso más allá de cuántos premios tuvieron ambas, esta es la huella más fuerte del "Barbenheimer", un fenómeno que mostró que las salas podían ofrecer aún motivos para la asistencia masiva, en un año donde la gran fantasía fracasó en números (la caída de los superhéroes fue notable) pero las cifras se acercaron bastante a la era prepandemia. Con, además, las plataformas recortando costos y replanteando inversión. Hay que ver estos premios bajo esa óptica, sin importar demasiado quién se llevó el globito dorado.