La estrella pop Katy Perry vendió los derechos de su obra, que incluye los cinco discos que lanzó entre 2008 y 2020, por 225 millones de dólares a la compañía Litmus Music. El negocio de la música no descansa.

Así lo informó la propia empresa, que aclaró que el acuerdo incluye las participaciones de Perry en las respectivas cintas maestras y los derechos de publicación, aunque Universal Music Group, la discográfica que publicó originalmente estos discos, continuará siendo propietaria de los masters.

Los derechos vendidos abarcan los discos que publicó con Capitol Records: "One of the Boys", "Teenage Dream”, “Prism”, “Witness” y “Smile”. A pesar de contar con sólo un año de vida, la empresa ya adquirió también los derechos de las grabaciones maestras de Keith Urban.

Algunos de los álbumes de los que litMUS tendrá ahora los derechos son álbumes multi-platino de la RIAA, como One of the Boys (3 millones de unidades), Teenage Dream (9 millones de unidades) y PRISM (5 millones de unidades). Fue nominada a más de 340 premios -incluidos los American Music Awards y los Billboard Music Awards- y ha ganado más de 100 galardones.

Forbes calcula que Perry, de 38 años, tiene un patrimonio neto de 38,5 millones de dólares y anteriormente la situó entre las mujeres mejor pagadas de la música entre 2011 y 2019. Es una de las artistas musicales con mayores ventas de la historia. Se sitúa entre las cinco artistas que vendieron 100 millones de discos digitales, según la Recording Industry Association of America, y es la primera de Capitol Records en alcanzar tales cifras.

La decisión de Katy de vender su catálogo, además de generar una ganancia millonaria, está inspirada por el deseo de volver a trabajar con Dan McCarroll, quien colaboró con la intérprete de I Kissed A Girl cuando ambos eran parte de Capitol Records.

“Katy Perry es una visionaria creativa que ha tenido un gran impacto en la música, la televisión, el cine y la filantropía. Es un gran honor para mí colaborar con ella nuevamente y ayudar a Litmus a manejar su increíble repertorio”, dijo por su parte Dan McCarroll, el expresidente de Capitol Records y cofundador de Litmus.

Si bien en este año se popularizó más la venta de derechos de canciones, desde hace tiempo varios artistas cedieron los derechos de su catálogo musical a cambio de grandes sumas.

Justin Bieber vendió su catálogo a Hipgnosis Song Capital por 200 millones de dólares a principios de este año.

Bob Dylan vendió su catálogo de canciones a Universal Music Group por entre 250 y 350 millones de dólares en 2020 y su catálogo de grabaciones a Sony en 2022, por entre 150 y 200 millones de dólares.

El patrimonio de la difunta estrella del rock David Bowie se vendió a Warner Chappell Music por unos 250 millones de dólares.

Phil Collins y sus compañeros de la banda Genesis vendieron su trabajo individual y en grupo a Concord Music Group por unos 300 millones de dólares.

Sting vendió su catálogo a Universal Music Publishing Group por unos 300 millones de dólares.

Bruce Spingsteen y Paul Simon también realizaron ventas de catálogo por 500 y 250 millones de dólares respectivamente.