Priscilla, la película sobre la vida de la pareja de Elvis Presley, es uno de los últimos estrenos que verá la cartelera este 2023. Dirigida por Sofía Coppola, y a un año del estreno de la versión de Baz Lurhmann, esta historia intenta darle un giro a la versión que conocen todos sobre el Rey del Rock y poner en foco a la visión femenina de lo que pasó.

Después de On The Rocks, la cineasta vuelve a la pantalla grande con la adaptación cinematográfica de Elvis & Me, el libro que escribió Priscilla Presley en 1985 y que narra sus vivencias al lado de una de las figuras más importantes en la historia de la música. En esta oportunidad, los actores Jacob Elordi y Cailee Spaeny son quienes se ponen en la piel de los protagonistas.

El film se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Venecia y hará lo propio en Argentina el 28 de diciembre. Coppola ya había adelantado que quizás la película no iba a encantarle a los fans de Elvis. Según explicó, su objetivo no es que los seguidores del Rey del Rock aprueben la película, sino de hacerle justicia a la figura de Presilla.

Para poder hacer la historia lo más fiel posible, la directora pasó horas conversando con Priscilla Presley: una instancia fundamental para generar un acercamiento más real a sus memorias. "Todo se basa en cómo ella describe su vida en el libro. Me sorprendió mucho que expresara todo eso en el libro y nadie pareciera darse cuenta", afirmó según una nota en Variety.

"Nadie parece conocer su historia, no sabemos mucho de ella. El hecho de que fuera tan joven -la dinámica de poder de su relación ya era complicada-, pero que fuera mucho más joven y que él pudiera tener más poder si algo no le gustaba", explicó la cineasta sobre la diferencia de edad entre ambos. Al momento de conocerse, Priscilla tenía 14, y Elvis ya tenía 24.

"Creo que estaba en una situación muy difícil y el hecho de que lo superara y tuviera la fuerza para irse y hacer su propia vida sin dejarse abatir por ello me parece realmente impresionante", agregó.

Sobre la construcción del personaje de Elvis y no hacerlo quedar como un villano

La decisión de hacer una película sobre Priscilla Presley significó no endiosar tanto a la figura de Elvis, algo que sí se puede ver en la versión de Baz Lurhmann, en la que el actor Austin Butler se puso en la piel del cantante y compositor.

Mientras que la familia de Elvis quedó conforme con la película de Luhrmann, no fue el mismo caso para la versión de Sofia Coppola. En su momento, la difunta hija de Priscilla y Elvis, Lisa Marie, escribió unos correos electrónicos a la cineasta antes de su muerte en enero de este año en los que calificaba el guión de "escandalosamente vengativo y despectivo."

"Mi padre solo aparece como un depredador y manipulador", escribió Lisa Marie en uno de los correos. "Como su hija, leo esto y no veo nada de mi padre en este personaje. Leo esto y veo la perspectiva de mi madre sobre mi padre. Leo esto y veo su perspectiva escandalosamente vengativa y despectiva y no entiendo por qué", afirmó.

Sin embargo, la película sí obtuvo el apoyo de Priscilla Presley. Para eso, la directora aseguró que trabajó mucho para una escena en la que Elvis empieza a hacer las valijas de la protagonista violentamente después de que ella descubra una nota de amor de otra mujer.

"Intenté que no fuera en blanco y negro. Intenté que no fuera el villano", dijo Coppola. "Pero esa escena fue la más dura, fue realmente difícil hacerla. Solo hicimos unas pocas tomas. No podía verla siendo tratada de esa forma tan cruel. Pero es una historia de amor hacia ella y tuvo muchos altibajos, así que intenté equilibrarla para que tuviera momentos emocionantes y momentos oscuros", recordó.