La liberalización cambiaria en Argentina aún está lejos de concretarse, según Domingo Cavallo, quien recomendó al Gobierno avanzar sin demoras hacia la eliminación total de las restricciones al dólar. El exministro de economía planteó que mantener trabas al mercado cambiario y a la intermediación financiera en moneda extranjera impide consolidar la estabilidad y reactivar la economía argentina.

“El Gobierno no debería temerle a la liberalización completa del mercado cambiario ni a la eliminación de todo vestigio de represión financiera”, aseguró Cavallo, en un análisis publicado en su blog personal.

Aunque el Ejecutivo habilitó el acceso al dólar oficial para personas humanas, Cavallo subrayó que las empresas siguen limitadas en sus operaciones. Esto, señaló, significa que no puede hablarse de una liberalización plena y que subsisten distorsiones que afectan tanto al tipo de cambio como a las expectativas de los agentes económicos.

Uno de sus principales argumentos es que el peso argentino está sobrevaluado, lo cual genera un riesgo serio si se avanza en la apertura comercial. Según el exministro, esto puede producir un impacto negativo sobre la industria local, más aún en un contexto internacional marcado por restricciones de Estados Unidos a sus importaciones, que obligan a los exportadores globales a buscar mercados alternativos, muchas veces a precios por debajo de sus costos.

Cavallo insistió en que levantar todas las restricciones al dólar permitiría re monetizar la economía, tanto en pesos como en divisas, facilitaría la baja de las tasas de interés reales y disiparía el temor a saltos abruptos del tipo de cambio tras las elecciones. “La estricta política fiscal es el mejor reaseguro de que la eliminación de las restricciones distorsivas sólo va a ayudar a la consolidación de la estabilidad”, aseguró.

El economista destacó además que la liberalización cambiaria completa estimularía las exportaciones de bienes y servicios y permitiría abrir la economía sin el efecto destructivo que provoca la competencia importada cuando el dólar está retrasado. Para Cavallo, esta sería la base de un proceso sostenido de crecimiento económico en Argentina.

Respecto a la inflación, Cavallo reconoció un leve rebote en junio según mediciones privadas, aunque aclaró que sigue dentro del rango registrado desde noviembre, por lo que no ve riesgos inmediatos de desborde inflacionario.

En cuanto a la actividad económica, el exfuncionario señaló que el Estimador mensual de Actividad Económica (EMAE) mostró una mejora en abril frente a marzo, pero advirtió que hay signos de desaceleración en mayo y junio, algo que atribuyó al elevado nivel de las tasas reales de interés, que actúan como freno al consumo y a la inversión.