Explorando oportunidades de inversión más allá de la renta variable
Puede que la segunda oleada de la crisis bancaria haya pasado, pero la amenaza de recesión sigue acechando, merece la pena considerar activos alternativos. No hay por qué confiar únicamente en el efectivo, ya que existen otras opciones más atractivas.
Al parecer, los fondos del mercado monetario (FMM) se volvieron mucho más interesantes y fiables. Según Reuters, los activos de los MMF estadounidenses alcanzaron un nuevo récord de $5,8 trillion ($5,8 billones), ya que los inversores ávidos de rentabilidad siguieron recurriendo a los títulos de deuda a corto plazo.
Así pues, a pesar del riesgo de impago, los bonos del Tesoro siguen captando la atención de los inversores. El único problema es que la perspectiva de nuevas subidas de tipos, los comentarios pesimistas de los portavoces de la Fed y la amenaza de una revisión de la calificación crediticia del país están empujando los rendimientos ligeramente al alza de nuevo.
¿Qué es un fondo del mercado monetario?En pocas palabras, es un fondo de inversión que invierte en activos de alta calidad, como títulos del Estado y empresas públicas. Tiene un riesgo bajo, pero ofrece un rendimiento de alrededor del 4%, lo que lo hace atractivo para los inversores conservadores.
La inversión inicial mínima suele oscilar entre $500 y $5.000 dólares, lo que lo hace accesible a muchos. Los fondos monetarios son atractivos porque permiten beneficiarse de un cambio en la política monetaria. Los inversores que no disponían de fondos suficientes para comprar letras del Tesoro o valores corporativos podían invertir en fondos como el Morgan Stanley Institutional Liquid Government Securities Fund, el State Street US Government Money Market Fund, etc.
Al igual que ocurre con la economía, las perspectivas siguen siendo sombrías. Algunos esperan un descenso, otros un aumento. Según los analistas de UBS, por ejemplo, el apetito de los bancos centrales por el oro podría elevar el precio del oro los $2.100 dólares por onza a finales de año.
Los datos históricos también respaldan la noción de crecimiento: cuando el 70% de la curva de rendimientos de la deuda pública estadounidense se invierte, el oro ha superado al S&P500 en los 24 meses siguientes. El reto ahora es entrar en las mentes y los dedos de los traders.
El problema es que los últimos se centran actualmente en factores como un mercado laboral sobrecalentado, los comentarios de línea dura de los miembros de la Reserva Federal y el fortalecimiento del dólar. A menos que mejore la retórica, el XAUUSD podría caer por debajo de los $1.950 dólares.
Entonces, ¿a quién hay que creer? Sólo a usted mismo y a su propio análisis. Pero si está pensando en invertir a corto plazo, sea prudente y prepárese para posibles picos de volatilidad. Una pista: preste especial atención a los datos macroeconómicos entrantes.
* Analista de TradingView