Plazo fijo y bonos atados a la inflación crecen con fuerza por el dólar anclado
En lo que va de marzo el stock de depósitos a plazo ajustables por UVA del sector saltó más del 10%. Ayer el 44% de la gran colocación del Tesoro fue a una Lecer a 2022 que no pagará tasa adicional por sobre el IPC. El mercado compra tipo de cambio pisado pero alta inflación
La ralentización del ritmo de devaluación del tipo de cambio oficial y la relativa calma de los dólares paralelos son condimentos de un nuevo escenario en que el mercado no avisora un pronto salto cambiario. Donde el Gobierno aún no logró alinear expectativas es en la meta de inflación y los agentes económicos prevén entre un 10 y un 20% más que el 29% proyectado en el Presupuesto. En este cuadro, las colocaciones indexadas ganan fuerza en las preferencias de inversores y ahorristas.
Dos datos recienten muestran una persistencia de la búsqueda de cobertura contra la inflación. Por un lado, en la primera licitación de deuda en pesos de marzo, en la que el Ministerio de Economía colocó casi 77.000 millones y embolsó financiamiento neto por sobre los vencimientos por 67.400 millones, el gran protagonista fue un instrumento indexado: el 44% del monto emitido fue en la nueva Letra ajustable por CER (un coeficiente que evoluciona en línea con el IPC) al 28 de febrero de 2022.
A diferencia de con la Letra a Descuento y la Letra a ajustable por Tasa de Pases, los otros títulos ofrecidos, la Secretaría de Finanzas no le puso precio mínimo a la Lecer. El piso de precio para las ofertas sirve para fijar una tasa máxima aceptada. Como la demanda por ese instrumento fue muy elevada (llegó a 43.033 millones y el Gobierno adjudicó 33.914 millones), que la Lecer se colocó a la par, es decir, al valor nominal, lo que hará que no se pague una tasa extra por sobre el ajuste inflacionario.
La gran demanda de títulos en pesos atados al IPC tiene como base la fuerte reducción de las expectativas de devaluación del mercado, al compás de intento oficial por usar el tipo de cambio como ancla de la inflación y del mayor ingreso de divisas que habilitaron los superprecios de los commodities.
Así, según un cálculo de Delphos Investment en base a datos de Bloomberg, la expectativa de suba del dólar para 2021 implícita en la cotización de los bonos argentinos perforó el 30% y se acerca al objetivo presupuestado (25%). A comienzos de año superaba el 55%.
Plazos fijos UVAPor otro lado, el stock de plazos fijos UVA del sector privado, las únicas colocaciones bancarias que garantizan no perder poder adquisitivo, sigue en ascenso. Luego de crecer 18% en enero (en el promedio mensual vs el stock promedio de diciembre) y 24% en febrero, subió otro 10,3% en los primeros once días de marzo (último dato del Banco Central disponible) respecto del cierre del mes previo.
En contraste, en el mismo lapso de marzo, los plazos fijos tradicionales aumentaron su volumen en 1,5%. Estas colocaciones, con una tasa mínima establecida en el 37% nominal anual para los depósitos minoristas, vienen perdiendo sistemáticamente contra la inflación desde hace al menos seis meses. Con un rendimiento del 3% a 30 días, marzo no será la excepción.
Los plazos fijos UVA son depósitos que actualizan su valor de acuerdo a la evolución de la inflación y pagan un plus de alrededor del 1% nominal anual. Para hacerse de la cobertura de poder adquisitivo, el ahorrista debe dejar un mínimo de 90 días depositado el dinero, dos meses más que el plazo mínimo de los depósitos tradicionales.
Existe una opción de plazo fijo UVA precancelable a partir de los 30 días, que le permite al depositante acceder a sus pesos de forma anticipada en caso de necesitarlos, aunque en este caso no recibirá la actualización de acuerdo al costo de vida sino una tasa de precancelación que hoy se ubica en 30,5% nominal anual, lo que equivale al 2,5% mensual.
Pese al furor de los últimos meses ante la aceleración de la inflación que pasó a terreno negativo el rendimiento de los plazos fijos tradicionales, los plazos fijos UVA representan todavía una porción muy reducida del stock total de depósitos a plazo: al 11 de marzo solo eran el 3,1%.