Bolsonaro inyecta 30 mil millones de dólares en la economía brasileña
El mandatario lanzó subsidios a trabajadores y beneficios para empresas, además de adelantar el aguinaldo a los jubilados
El Gobierno brasileño anunció una serie de iniciativas que inyectarán hasta 150.000 millones de reales (30.000 millones de dólares) a la economía, en un esfuerzo por reactivar la economía y al mismo tiempo impulsar la campaña de reelección del presidente Jair Bolsonaro de cara a las elecciones de octubre.
Entre las medidas anunciadas, el mandatario firmó un decreto que permite a los empleados estatales retirar hasta 1.000 reales de su respectivo fondo nacional de garantía por tiempo de servicio, FGTS, además de adelantar a abril-junio un pago extra a los jubilados que habitualmente se hace a fin de año.
El Programa Renta y Oportunidad lanzado por Bolsonaro con sus principales ministros, apunta a obtener el apoyo de la clase asalariada y los jubilados que está perdiendo la carrera contra la inflación, que fue del 10,5% en 2021, la más alta desde 2015.
En el marco del programa, el gobierno también aprobó un paquete de créditos subsidiados para pequeñas empresas a través del banco Caixa Econômica Federal.
Elecciones
"La expectativa del gobierno es que todas las medidas presentadas inyecten más de 150.000 millones de reales a la economía del país", señaló la oficina presidencial en un comunicado.
Los anuncios se producen en un momento en que la economía brasileña muestra signos de desaceleración y también, claramente, con un ojo puesto en las elecciones de octubre.
"Las medidas anunciadas tienen atractivo popular, lo que en parte ayuda a explicar por qué Bolsonaro ha ganado en intención de voto en las más recientes encuestas. Por el lado económico, estas medidas no tendrán un gran efecto en el desempeño del PIB", Luciano Rostagno, estratega jefe de Banco Mizuho para América Latina, en conversación con el sitio BNamericas.
Tras una expansión económica de 4,6% el año pasado, se espera que Brasil crezca menos de 0,5% este año y podría incluso caer en recesión si las cifras siguen empeorando, según los economistas.
Los brasileños acudirán a las urnas en octubre para elegir presidente, gobernadores estatales y legisladores.
Previsiones en baja
Según las encuestas más recientes, el expresidente de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva sigue siendo el favorito, pero Bolsonaro ha recortado recientemente la distancia, en gran parte debido a los altos niveles de víctimas mortales durante la peor fase de la pandemia del COVID-19.
Las medidas económicas tendrán un impacto positivo directo en las familias de bajos ingresos, una parte del electorado que es más probable que respalde a Lula.
Brasil, donde hay 120 millones de personas con alguna inseguridad alimentaria y 19 millones en situación de hambre, redujo la perspectiva de crecimiento de su economía para 2022 de 2,1% a 1,5%, y aumentó las previsiones de inflación para este año.