Cae la producción industrial en Brasil impulsada por cinco estados
La contracción fue de un 7,8% respecto a un año, dijo la agencia nacional de estadísticas brasileña
Cinco estados fueron responsables de la caída de 0,6% en la producción industrial de Brasil entre septiembre y octubre de este año, incluido São Paulo, el parque industrial más grande del país, con una caída de 3,1 por ciento.
Según informó la Agencia Brasil, las otras localidades fueron Santa Catarina (-4,7%), Pará (-4,2%), Minas Gerais (-3,9%) y Espírito Santo (-1%). Los datos fueron publicados en Río de Janeiro, por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
La caída nacional no fue mayor porque nueve de las 15 áreas encuestadas tuvieron alta producción en el período, especialmente en el Nordeste (5,1%), Mato Grosso (4,8%) y Ceará (4,1%). Goiás se mantuvo estable.
En comparación con octubre de 2020, 13 de las 15 áreas encuestadas tuvieron una disminución, las mayores de las cuales se observaron en Pará (-14,2%), Santa Catarina (-12,5%), São Paulo (-12,3%) y Amazonía (-11,9%). Río de Janeiro y Espírito Santo fueron los únicos estados con incrementos, respectivamente, del 6,6% y del 6,1 por ciento.
Dificultades
En el resultado acumulado del año, diez de las 15 áreas analizadas tuvieron alzas, destacando Santa Catarina (13,8%), Minas Gerais (12%) y Paraná (11,2%). De los cinco lugares en declive, Bahía tuvo la mayor retracción: -13,1 por ciento.
También se registraron máximos en diez de los 15 lugares en el acumulado de 12 meses, también con destaques para Santa Catarina (13,9%), Minas Gerais (11,9%) y Paraná (12%). Y Bahía, una vez más, tuvo la mayor caída (-10,8%), entre los cinco lugares con pérdida de producción.
Economistas en una encuesta de Bloomberg habían previsto un alza del 0,8 por ciento. La producción se contrajo un 7,8% respecto a un año, dijo la agencia nacional de estadísticas.
Los elevados precios y las altas tasas de interés han frenado la recuperación de la economía más grande de América Latina. Brasil entró en una recesión técnica en el tercer trimestre, cuando los consumidores y las empresas vieron mermar su poder adquisitivo, mientras que el importantísimo sector agrícola se vio afectado por la sequía y las heladas.