Canadá congelará la compra de armas de fuego
El primer ministro Justin Trudeau presentó un proyecto que propone una batería de medidas para atacar el aumento de homicidios en Canadá, días después de los tiroteos en Estados Unidos. Cómo es el proyecto y qué posibilidades tiene de aprobarse
A seis días del sangriento tiroteo en la escuela primaria de Texas, Estados Unidos, que dejó un saldo de 19 niños y 2 maestras muertas, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, presentó un proyecto de ley para congelar la compra e importación de armas de fuego, entre otras medidas que buscan frenar el aumento de la violencia.
Si bien la propuesta no llega a una prohibición total de las armas de fuego, limitaría efectivamente su número en Canadá. “En otras palabras, estamos limitando el mercado de las armas de fuego”, resumió Trudeau en una conferencia de prensa. “A medida que vemos que la violencia armada continúa aumentando, es nuestro deber seguir tomando medidas”, agregó. Aunque la tasa de tiroteos masivos en Canadá es sustancialmente menor que en Estados Unidos, la tasa de homicidios sí aumentó en el último tiempo y superó a la de otros países desarrollados.
En Estados Unidos, la pelea y el debate por el control de la portación de armas se reaviva con cada tiroteo, y así volvió a suceder con la masacre en la escuela primaria de Texas. "Solo necesitamos mirar al sur de la frontera para saber que si no tomamos medidas con firmeza y rapidez, empeorará cada vez más y se volverá más difícil de contrarrestar", subrayó Justin Trudeau. En vistas de esto, Canadá busca anticiparse a alguna tragedia y ya contar con una legislación fuerte.
Por eso, en el proyecto de ley se incluyen medidas como estas:
- impedir que cualquier persona sujeta a una orden de protección o que haya cometido violencia doméstica o acoso obtenga o conserve una licencia para portar armas de fuego
- una nueva ley de "bandera roja" que permitiría a los tribunales exigir que las personas consideradas un peligro para sí mismas o para otros entreguen sus armas a la Policía
- seguridad de quienes presentan la solicitud durante el proceso, a menudo mujeres en peligro de abuso doméstico, al proteger sus identidades
- requerimientos para que los cargadores de armas largas se modifiquen de manera permanente, de modo que nunca puedan contener más de cinco rondas de disparos
- prohibición de venta y transferencia de cargadores de gran capacidad
Este es el intento más ambicioso del gobierno para restringir el acceso a las armas de fuego en Canadá, y fue presentado por el ministro de Seguridad Pública, Marco Mendicino, en la Cámara de los Comunes el lunes. "El proyecto de ley que acabamos de presentar representa un hito en medio de una batalla larga y difícil que tiene lugar en nuestras calles todos los días", dijo Mendicino en la conferencia de prensa. "Es una batalla que se ha cobrado demasiadas vidas, dejando sillas vacías en la mesa y pupitres vacíos en nuestras aulas", lamentó.
En este sentido, también se prohibirían algunos juguetes que parecen armas reales, como los rifles de airsoft. La semana pasada, un policía de Toronto disparó y mató a un hombre que llevaba una pistola de perdigones, reportó Reuters.
"Debido a que se ven como armas de fuego reales, la Policía debe tratarlas como si fueran reales. Esto ha tenido consecuencias trágicas", afirmó el ministro de Justicia, David Lametti.
Trudeau aseguró que el aumento de los fondos ya ayudó a los funcionarios fronterizos a duplicar la cantidad de armas de contrabando confiscadas en la frontera de Estados Unidos. "Será ilegal comprar, vender, transferir o importar armas de fuego en cualquier parte de Canadá", destacó el premier canadiense, citado por France 24.
Legislación sobre armas de fuego en CanadáEl país que gobierna la administración de Trudeau está en una mejor situación que Estados Unidos: su legislación es más sólida —ya cuenta con planes para prohibir 1.500 tipos de armas de fuego de estilo militar y ofrece un programa de recompra obligatorio que comenzará a finales de año— y sus tiroteos son muchos menos. Sin embargo, no se olvidan masacres como la de seis canadienses musulmanes en la mezquita de la ciudad de Quebec en 2017 o el alboroto de un hombre armado que mató a 22 en la zona rural de Nueva Escocia en 2020.
Además, aunque su tasa de homicidios con este tipo de artefactos de fuego es menos de una quinta parte de la que registra el territorio estadounidense, la violencia fue en aumento. Para 2020, fue cinco veces mayor a la de Australia, según Statistics Canada.
La nueva legislación que impulsó Trudeau se enfrenta a consideración de la Cámara de los Comunes, pero, según reportó Toronto Star, tiene muchas posibilidades de ser aprobada: el Parlamento está menos dividido hoy de lo que podría parecer. En este sentido, el apoyo del Partido Nuevo Democrático, de tendencia izquierdista, sería clave para los liberales gobernantes, que actualmente son minoría en el Congreso.
"No podemos permitir que el debate sobre las armas se polarice tanto que no se haga nada. No podemos permitir que eso suceda en nuestro país. Esto se trata de la libertad. La gente debería ser libre de ir al supermercado, a su escuela o a su lugar de culto sin miedo", opinó Pierre Poilievre, quien se postula para ser el líder del opositor Partido Conservador.
Tracy Wilson, vicepresidenta de relaciones públicas de la Coalición Canadiense por los Derechos de las Armas de Fuego, criticó el proyecto de ley y el enfoque del gobierno de Trudeau sobre el tema, y dijo que la ley propuesta pone demasiado énfasis en la regulación de las armas de fuego legales y no lo suficiente en los delincuentes y las armas sin licencia. "Una vez más, está apuntando al grupo demográfico completamente equivocado", dijo.