El coronavirus impacta con fuerza en América Latina y Chile no es la excepción. La ocupación de camas de terapia intensiva (UTI) alcanzó el 96% en el país andino. Para palear la situación, el gobierno de Sebastián Piñera decidió implementar una serie de incentivos económicos a las clínicas y hospitales para que sumen plazas y evitar el colapso del sistema sanitario. 

El Ministerio de Salud vecino reportó este miércoles casi 5.500 casos, lo que significa un descenso respecto a los días anteriores. Sin embargo, el panorama continúa siendo muy delicado, principalmente en el área de las internaciones. 

Los datos públicos indican que hay aproximadamente 4.100 camas de terapia intensiva ocupadas de las 4.272 disponibles. De ese total, 3.271 se encuentran siendo utilizadas por pacientes con Covid-19, 2.823 de ellos están con respirador automático.  

A pesar de que desde el inicio de la pandemia Chile triplicó sus UTI, incluso a través de decretos, la cifra actual de camas disponibles no es suficiente para contener los casos registrados. Por esta razón, el gobierno de Piñera necesita aumentar su capacidad lo máximo posible. 

 

El plan para aumentar la capacidad del sistema 

La administración anunció recientemente que para la semana próxima buscará llegar a las 4.500 camas de cuidados intensivos. Es decir, una ampliación de 300 UTI. Para hacerlo, se requerirá la ocupación total de los pabellones quirúrgicos, el uso de las unidades de recuperación y el reacondicionamiento de algunos “boxes” que se utilizan para la atención en las unidades de Urgencia. 

De manera complementaria, el gobierno chileno le ofreció a las clínicas y hospitales un incentivo económico de más de 6,3 millones de pesos chilenos, equivalente a 9.000 dólares, de manera mensual por cada unidad de cuidados intensivos que sumen. 

 

La vacunación en Chile 

La contracara de esta situación es la exitosa campaña de vacunación que convirtió a Chile en el país que por lejos más vacunó en América Latina. Al día de hoy se han vacunado a 7,5 millones de personas con una dosis y a 4,6 millones con dos dosis. La mayoría de ellas eran inyectables de la compañía china Sinovac, aunque también dispone del fármaco de los laboratorios Pfizer.