Crean una comisión especial para investigar atentados a mezquitas
Los dos ataques estuvieron precedidos por una proclama supremacista
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, anunció la decisión de crear una comisión real que tenga como para investigar el atentado contra dos mezquitas de Christchurch, que causó 50 muertos y medio centenar de heridos.
"Mientras los neozelandeses y las comunidades musulmanas de todo el mundo guardan luto y muestran su compasión, también se preguntan con toda la razón del mundo cómo fue posible que ese atentado terrorista ocurriera aquí," declaró Ardern en una rueda de prensa en la que anunció la creación de la comisión con la que intentará resolver ese interrogante, luego de la conmoción que provocaron los ataques realizados en ese país.
Según la información publicada por el diario local New Zealand Herald, este tipo de comisiones independientes están reservadas para abordar los eventos más graves y de mayor importancia para la población, informó la agencia alemana de noticias DPA, para graficar la relevancia que se le otorgó al tema.
Ardern anticipó que la investigación se centrará en los acontecimientos previos al ataque y no tanto en la respuesta policial y gubernamental a esos hechos.
"Es importante que no quede nada sin revisar para poder llegar hasta el fondo del asunto" manifestó la jefa de Gobierno, comprometida con el esclarecimiento y la prevención de atentados..
La comisión también investigará la actuación del Servicio de Inteligencia y Seguridad de Nueva Zelanda (NZSIS, por sus siglas en inglés), la Oficina Gubernamental de Seguridad en las Comunicaciones, la Policía, Aduanas, Inmigración y cualquier departamento relevante del Gobierno, agregó la primera ministra.
El 15 de marzo pasado, el australiano Brenton Tarrant irrumpió a tiros en dos mezquitas asesinado a medio centenar de fieles musulmanes, en una acción que transmitió en vivo durante 17 minutos a través de redes sociales.
Minutos antes de perpetrar la matanza, el atacante publicó un manifiesto supremacista en el que justificaba la balacera y que fue enviado por correo electrónico Ardern y otros 30 destinatarios, incluidos políticos, instituciones y medios de comunicación.