El gobierno de EEUU comienza a cobrar deudas estudiantiles en mora
Casi 43 millones de personas se verán afectadas por la disposición de la Administración Trump
La Oficina de Ayuda Federal para Estudiantes (FSA) de Estados Unidos reiniciará el próximo lunes el cobro de préstamos estudiantiles federales en mora, una acción que se había suspendido en el año 2020. La medida promete generar polémica, en un entorno económico incierto para numerosos ciudadanos estadounidenses, ya que el gobierno podría retener reembolsos de impuestos, salarios federales y beneficios sociales con el fin de liquidar la deuda acumulada.
La medida abarca a unos 42,7 millones de prestatarios, que suman más de 1,6 billones de dólares en deuda estudiantil, informan medios locales. Desde el gobierno que encabeza el presidente Donald Trump dijeron que la reanudación del cobro a deudores en mora busca proteger a los contribuyentes de asumir el costo de préstamos contraídos de manera voluntaria. Más de 5 millones de deudores no realizan un pago desde hace más de 360 días, señalan los medios.
Al respecto, la secretaria de Educación, Linda McMahon, afirmó que "los contribuyentes estadounidenses ya no se verán obligados a servir de garantía para políticas irresponsables sobre préstamos estudiantiles". Esta declaración resalta la intención del gobierno de abordar la creciente crisis de la deuda estudiantil en el país.
El Programa de Compensación del Tesoro se pondrá nuevamente en marcha el 5 de mayo de este año. Todos los deudores morosos recibirán comunicaciones por correo electrónico, informándoles sobre los cambios y las acciones que deben tomar.
En estas comunicaciones, se invitará a los prestatarios a contactar al Grupo de Resolución de Incumplimiento para establecer un plan de pago basado en sus ingresos o registrarse en la rehabilitación de préstamos.
Notificaciones
La agencia informó que el manejo del proceso estará a cargo del Departamento del Tesoro, mediante un programa destinado a la retención de pagos gubernamentales. Esto significa que los reembolsos de impuestos, los salarios federales e incluso los beneficios sociales podrían ser retenidos con el fin de liquidar la deuda.
La FSA comenzará a enviar notificaciones para iniciar los embargos administrativos de salarios, lo que podría complicar aún más la situación financiera de los deudores morosos.