El Gobierno brasileño elevó sus perspectivas de crecimiento económico para este año hasta un 2,5%, tras el buen comportamiento del sector agrícola y del industrial durante el primer trimestre.

Según la Secretaría de Política Económica del Ministerio de Hacienda, la proyección de crecimiento económico para 2023 se ha revisado al 2,5%, frente a la estimación previa del 1,9% de mayo. La previsión de un aumento del 2,3% del Producto Interno Bruto (PIB) para 2024 se mantuvo sin cambios.

El presidente Lula da Silva había afirmado el mes pasado que Brasil crecería un 2% o más este año y criticó el nivel de las tasas de interés, que se han mantenido en el máximo del ciclo de endurecimiento de 13,75% desde septiembre de 2022, como impedimento para un mejor desempeño.

"La revisión del crecimiento fue motivada, sobre todo, por el resultado del PIB en el primer trimestre, mejor de lo esperado para el sector agrícola y para algunos subsectores de servicios e industria, y también por la expectativa de tasas de interés más bajas a final del año debido a la desaceleración de las proyecciones de inflación", dijo el Ministerio de Hacienda.

 

Ralentizaciòn

El ministerio revisó sus estimaciones de inflación al 4,85% para este año, lo que supone una mejora respecto a la proyección anterior del 5,58%. Para el año próximo, la proyección es ahora del 3,3%, por debajo del 3,63% anterior. Sin embargo, ambas se mantienen por encima de los objetivos oficiales del 3,25% para 2023 y del 3,0% para 2024.

La mayor economía de América Latina mostró un sólido comportamiento en el primer trimestre, impulsado por un repunte del crecimiento agrícola, que dio lugar a una oleada de revisiones al alza del PIB brasileño. Los economistas privados encuestados semanalmente por el Banco Central esperan ahora que el crecimiento de este año alcance el 2,24 por ciento.

Las perspectivas incorporan una ralentización en la segunda mitad del año en medio de condiciones financieras restrictivas y elevados costos de endeudamiento.

El Banco Central de Brasil ya ha indicado que podría poner en marcha una reducción de las tasas de interés el mes que viene si se consolida un escenario de mejora de la inflación.

 

Recorte

Al respecto, el secretario de política económica de Brasil, Guilherme Mello, dijo que desde algún tiempo están dadas las condiciones para que el Banco Central se embarque en un proceso de reducción de tasas de interés "vigoroso y sostenido".

En una conferencia de prensa, Mello consideró que los altos costos de endeudamiento podrían ser el principal factor de peso sobre la trayectoria del crecimiento de la deuda pública de Brasil, y enfatizó que el país gastará alrededor de 680.000 millones de reales (141.910 millones de dólares) este año en pagos de intereses.