El Gobierno del Reino Unido solicitó la ayuda de los militares para el transporte de pacientes durante las huelgas de los empleados de las ambulancias previstas para fines de diciembre, informó el canal 'Sky News'.

La semana pasada, el sindicato británico GMB informó que más de 10.000 empleados de ambulancias en Inglaterra y Gales votaron a favor de ir a la huelga el 21 y el 28 de diciembre en contra de la inflación y en reclamo de un aumento de salarios que compense la suba del costo de vida.

El periódico The Times informó entonces que las autoridades podrían pedir a los militares que ayuden en los hospitales, y el presidente del gobernante Partido Conservador, Nadhim Zahawi, confirmó que el Gobierno estaba considerando esa posibilidad, publica la agencia Sputnik.

"El Gobierno solicitó oficialmente a las Fuerzas Armadas que ayuden al sistema de salud, ya que las huelgas afectarán el trabajo de los servicios", informó Sky News.

Según el medio británico, actualmente los militares se están capacitando para conducir las ambulancias. Se espera que 600 militares ayuden como conductores de ambulancias y 150 más presten otro tipo de apoyo al sistema sanitario.

Además, añade el canal, el 12 y el 14 de diciembre se celebrarán reuniones del comité de emergencia Cobra con el objetivo de discutir planes para mitigar el impacto de las huelgas.

Más temprano, Sky News también comunicó que los militares británicos reciben capacitación en los aeropuertos de Heathrow y Gatwick para sustituir a los empleados en el control de pasaportes mientras esten en huelga también para fin de mes.

Actualmente en el Reino Unido se observa una oleada de huelgas por la inflación récord que azota al país. Entre otros rubros se puede citar a empleados de las compañías ferroviarias, abogados, personal aeroportuario, agentes de fronteras, carteros y trabajadores de muchas otras áreas.

Después de empezar la guerra en Ucrania, se registró una fuerte suba de los precios de los combustibles y productos alimentarios en Europa y Estados Unidos. Además, en el Reino Unido el encarecimiento del costo de la vida golpeó a millones de familias.