Israel llevará a cabo una operación militar contra la ciudad de Rafa, en el sur de la Franja de Gaza, independientemente de que se alcance o no un acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes de Hamás, declaró el primer ministro, Benjamín Netanyahu.

"La idea de que detendremos la guerra antes de alcanzar todos sus objetivos está fuera de toda duda. Entraremos en Rafa y eliminaremos allí a los batallones de Hamás, con o sin acuerdo, para lograr la victoria completa", indicó el mandatario según un comunicado de su oficina.

Asimismo trascendió que Israel planea establecer un sofisticado sistema de puestos de control que impedirá a los hombres en edad de servicio militar abandonar la ciudad de Rafa, de acuerdo con declaraciones al medio Middle East Eye de un alto funcionario occidental familiarizado con los planes del país hebreo.

Los puestos de control están diseñados para permitir que algunas mujeres y niños salgan de la ciudad antes de un presunto ataque israelí, pero es probable que los hombres palestinos sean separados de sus familias y permanezcan atrapados en Rafa durante el ataque, señala la publicación.

 

Compromisos

En tanto, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, cree que Israel llevará a cabo su anunciada ofensiva en Rafa "en unos días" e instó a EE.UU. a influir en el Gobierno de Netanyahu para evitar una gran catástrofe en el sur de la Franja de Gaza, donde están hacinados más de un millón de palestinos desplazados.  

Netanyahu y el presidente estadounidense, Joe Biden, mantuvieron una conversación telefónica el domingo en la que el inquilino de la Casa Blanca reafirmó su "férreo compromiso con la seguridad de Israel".

Además, Biden volvió a exigir a Hamás que libere a los rehenes "sin demora" para asegurar un alto el fuego en la Franja de Gaza. En lo relacionado al operativo israelí en Rafa, Biden reiteró su "clara postura" de que Washington no apoya ninguna operación en la localidad sin un plan humanitario adecuado y creíble.