El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha manifestado su optimismo respecto a las relaciones con Estados Unidos tras el retorno de Donald Trump al poder. En una reciente reunión con trabajadores de la industria nuclear, Putin afirmó que con la llegada de Trump, finalmente se vislumbra "luz al final del túnel" en las relaciones bilaterales. Este comentario se produce una semana después de la cumbre bilateral celebrada en Alaska, que Putin describió como "significativa y franca".

Putin destacó que, aunque hay un potencial para mejorar las relaciones, el papel de los "socios europeos" y las obligaciones de Estados Unidos con la OTAN son factores determinantes. "Los próximos pasos dependen del liderazgo de Estados Unidos", señaló Putin, elogiando las cualidades de liderazgo de Trump como una garantía para restablecer las relaciones. Sin embargo, el presidente ruso subrayó que los contactos con Ucrania continúan a nivel ministerial, sin ofrecer detalles específicos sobre posibles avances.

En términos generales, Putin expresó su deseo de que la cumbre en Alaska sea solo el comienzo de un acercamiento más amplio. "Espero sinceramente que los primeros pasos dados sean solo el comienzo de una restauración completa de nuestras relaciones", afirmó. No obstante, advirtió que el progreso también depende de las alianzas de Estados Unidos, especialmente en el contexto del bloque del Atlántico Norte, lo que sugiere que el camino hacia la normalización no será sencillo.