William y Harry, juntos, en un homenaje a la princesa Diana
Los hijos de Lady Di dejaron de lado sus diferencias y descubrieron una estatua en el Palacio de Kensington, en memoria del cumpleaños número 60 de su madre. En una ceremonia reducida, ambos declararon que esperan que la escultura "sea vista para siempre como un símbolo de su vida y su legado"
En lo que hubiera sido el cumpleaños número 60 de la princesa Diana de Gales, sus hijos William y Harry dejaron de lado sus diferencias y aparecieron juntos, por primera vez desde el funeral del duque de Edimburgo, para dar a conocer la estatua en homenaje a Lady Di. "Todos los días, deseamos que ella todavía estuviera con nosotros, y nuestra esperanza es que esta estatua sea vista para siempre como un símbolo de su vida y su legado", declararon.
Los duques de Cambridge y de Sussex decidieron juntarse a pesar de la pelea que los separa desde hace un tiempo, cuando Harry viajó a Estados Unidos junto a su esposa, Meghan Markle, y acusó a la familia real de tener actitudes racistas y criticó fuertemente a la institución. De hecho, ni su esposa ni sus hijos, Archie, y la recién nacida Lilibet, cuyo segundo nombre, Diana, honra a la difunta princesa; viajaron a Reino Unido, sino que se quedaron en California.
Según el libro Battle of Brothers del autor especialista en realeza Robert Lacey, William se refirió a Meghan Markle como "esa maldita mujer", algo que enfureció a Harry y los distanció aún más. Según Lacey, el príncipe Harry les dijo a sus amigos que le gustaría cerrar la brecha que lo separa de William y que incluso está dispuesto a reconocer algunos errores. Pero la posición del hermano mayor sigue firme: la investigación sobre el acoso por parte de Meghan al staff del palacio es una fuente de constante resentimiento.
La tensión, reportan medios ingleses, sigue muy vigente. El encuentro de ambos este jueves fue visto como un respiro en medio de una "guerra fría" que se libró entre los hermanos.
La estatua fue encargada originalmente en 2017 en el vigésimo aniversario de su muerte, pero se reveló este jueves en una ceremonia reducida debido a la pandemia del coronavirus (Covid-19). Harry voló desde California para la breve ceremonia, mientras que William llegó unos minutos después. Los dos tiraron de una cuerda para develar una escultura, fundida en bronce, de Diana rodeada de tres niños, en el Sunken Garden en el Palacio de Kensington, su antigua casa en Londres.
"Hoy, en lo que habría sido el cumpleaños número 60 de nuestra madre, recordamos su amor, fuerza y carácter, cualidades que la convirtieron en una fuerza para el bien en todo el mundo, cambiando innumerables vive para mejor", escribieron sus hijos en Twitter.
Today, on what would have been our Mother’s 60th birthday, we remember her love, strength and character – qualities that made her a force for good around the world, changing countless lives for the better. pic.twitter.com/jsZXyUsG7q
— The Duke and Duchess of Cambridge (@KensingtonRoyal) July 1, 2021La lista de invitados fue muy corta: asistieron Earl Spencer, Lady Sarah McCorquodale y Lady Jane Fellowes, los hermanos de Diana, así como el comité de estatuas y otros involucrados en la instalación y el diseño del jardín. El príncipe Carlos no fue a la ceremonia, y tampoco lo hizo la reina Isabel.
Muchas personas se reunieron frente al Palacio de Kensington, y los fanáticos de Diana colocaron flores y fotos en las puertas. La estatua puede ser vista por el público durante el horario de apertura del lugar.
El escultor Ian Rank-Broadley representó a Diana con el pelo muy corto, en los últimos años de su vida. El Palacio de Kensington dijo que la estatua tiene como objetivo reflejar la "calidez, elegancia y energía" de Diana, mientras que tres niños a su lado representan la "universalidad y el impacto generacional del trabajo de la princesa".
Rank-Broadley declaró: “Diana, Princesa de Gales, fue un ícono que tocó la vida de personas en todo el mundo, por lo que ha sido un privilegio trabajar junto al Príncipe William y el Príncipe Harry en esta estatua que conmemora su vida."
“Queríamos capturar su calidez y humanidad mientras mostramos el impacto que tuvo a lo largo de generaciones. Espero que la gente disfrute visitando la estatua y el Sunken Garden, y que se tome un momento para recordar a la princesa", concluyó el escultor.
En la estatua, además, se grabaron algunas líneas del poema "La medida de un hombre", que generalmente se suele leer para recordar a alguien que falleció:
Estas son las unidades para medir el valor
de esta mujer como mujer independientemente de su nacimiento.
No "¿Cuál era su posición?",
Sino "¿Tenía corazón?
¿Cómo interpretó el papel que le dio Dios?"
Rank-Broadley dijo que William y Harry lo ayudaron con fotografías, reminiscencias y anécdotas sobre su madre, en las que se basó cuando visitaban su estudio con regularidad. Al describirlo como un "esfuerzo de colaboración", dijo que había prestado "la mayor atención a ambos príncipes en lo que tenían que decir", y esperaba que la estatua pudiera proporcionarles algún "consuelo".
Los jardines en honor a la princesa DianaLa estatua está rodeada por un esquema de plantas y flores que fueron producidos por el equipo de Jardines y Propiedades de Historic Royal Palaces (HRP), una organización de caridad que gestiona varias propiedades reales. El trabajo comenzó en la ubicación en octubre de 2019 y desde entonces cinco jardineros pasaron un total de 1.000 horas trabajando en el espacio.
El diseñador de jardines Pip Morrison explicó que incorporó las estructuras históricas existentes del jardín con profundos bordes de flores y un generoso césped alrededor de la piscina "para crear un entorno más tranquilo y reflexivo para la estatua".
Se seleccionaron más de 4.000 flores para el proyecto, entre las que se encuentran algunas de las favoritas de Diana, como los nomeolvides, así como flores de primavera y verano en varios tonos pastel, como tulipanes, dalias y plantas de lavanda.
No es la primera vez que el Jardín Hundido, creado en 1908 a instancias de Eduardo VII, se viste de gala para rendir homenaje a Lady Di: cuando se cumplieron 20 años de ese fatídico 31 de agosto, se poblaron los parterres con flores de tonalidad pastel, emulando el inconfundible estilo de la princesa.