Empresas de educación a distancia se expanden en pleno aislamiento
En los últimos seis meses, varias compañías han crecido ofreciendo franquicias especializadas en capacitaciones virtuales. Cursos de diferentes oficios e idiomas son los más requeridos
Como consecuencia del aislamiento han desaparecido una gran cantidad de compañías, incluso, muchas que aún sobreviven están muy malheridas. Sin embargo, el lado B muestra a otras que no sólo han logrado salir airosas de la pandemia sino que, incluso, han visto crecer sus negocios. Es el caso de los emprendimientos de educación a distancia, un servicio que, fruto del confinamiento, no para de expandirse.
"Estas empresas que ofrecen cursos, enseñan idiomas o capacitan en oficios han fortalecido rápidamente sus programas de educación a distancia por medio de plataformas E-Learning. Eso les permitió crecer mucho últimamente", explica a BAE Negocios Ezequiel Devoto, Gerente General de la Asociación Argentina de Marcas y Franquicias (AAMF).
Hasta antes del 20 de marzo, Eddis Educativa tenía sesenta centros de clases presenciales y 20.000 alumnos que estaban a punto de comenzar sus cursos de capacitación laboral. Pero la pandemia complicó el panorama. "En una semana tuvimos que armar todo el sistema virtual y capacitar a docentes y administrativos para encarar la nueva realidad", cuenta Juan Pablo Silvano, Director y co-fundador de la empresa, junto a Mario Smith.
A más de seis meses del click, la experiencia fue mejor de la esperada en un principio. En lo que va de la cuarentena entregaron 53 nuevas franquicias y su cantidad de alumnos se duplicó con respecto a principio de año. Además, el mes pasado, vendieron un 50% más de cursos que en septiembre de 2019. "Hicimos un nuevo modelo de franquicia para los cursos online. Con el anterior formato, el franquiciado necesitaba USD20.000 para ingresar y hoy con $100.000 ya tiene el programa de enseñanza, nuestra capacitación y el armado de campañas publicitarias en redes sociales. Ellos nos dan el 20% de sus ingresos y el resto se lo quedan".
La empresa cuenta con siete sedes propias y casi cien franquicias. Últimamente sumaron socios en Bariloche, Formosa, La Banda (Santiago del Estero), Mar del Plata, Puerto Madryn, Recreo (Santa Fe), Roque Saenz Peña (Chaco) y Salto (Provincia de Buenos Aires).
Otro caso notable de reconversión hacia el formato online es el del Instituto Argentino de Peluquería y Belleza (IAP): durante la cuarentena abrió 60 nuevas franquicias educativas. ¨Muchos de nuestros nuevos franquiciados se habían quedado sin ingresos económicos y tuvimos la satisfacción de ayudar a más de 500 familias. Como resultado, nos expandimos en Chile, Paraguay, Uruguay, Perú, España y, mantuvimos la cantidad de franquicias sin ningún cierre por quiebra en México, Colombia y Bolivia¨, aseguran desde la entidad.
Para obtener la franquicia hay que contar con $120.000, la rentabilidad va entre el 20% y el 50% y el recupero de la inversión inicial en un plazo de 6 a 12 meses. En la actualidad, tiene más de 200 socios en nueve países de América latina.
Una de las empresas que tuvo que acomodarse a la nueva realidad fue Fisk, la red de institutos de enseñanza de inglés que tiene 50 licencias en Argentina, a la que se accede con un canon inicial de USD3.000. "Todos nos reinventamos. En la feria virtual que se realizará en noviembre vamos a presentar nuestra franquicia adaptada a estos tiempos. Nuestra plataforma no sólo servirá para enseñar sino también pronto estará preparada para que allí se rindan los exámenes", asegura Susana Perrotta, una de las socias.
Por otra parte, la ejecutiva agrega que, por el recorte de gastos de muchas familias, durante la cuarentena ha bajado la cantidad de estudiantes. "Ha cambiado el perfil, los adultos que prefieren lo presencial han dejado de tomar clases pero ahora hay más jóvenes". Además, asegura que la conectividad es una de las falencias que, en muchos casos, atenta contra la educación a distancia en Argentina.
AplicaciónLas aplicaciones de educación también han podido sacar tajada del aislamiento. Por caso, la app alemana especializada en enseñanza de idiomas Babbel tuvo un crecimiento de uso del 30% en la región. En septiembre, la herramienta registró 10 millones de suscriptores en todo el mundo. "Mucha gente aprovechó la cuarentena para mejorar y desarrollar una nueva habilidad, desde andar en bicicleta hasta la fotografía, hacer pan casero o aprender un nuevo idioma", comentó Arne Schepker, CEO de la empresa creada hace trece años. Y agregó: "En los últimos años, nuestro crecimiento fue muy constante. En 2018 alcanzamos una facturación de USD130 millones y hemos incrementado nuestros ingresos sustancialmente desde entonces. Pero la pandemia definitivamente apresuró este proceso. En sólo un año el promedio de lecciones de Babbel completadas alrededor del mundo creció un 100% a partir de esta nueva normalidad."