De un tiempo a esta parte, los carpinchos se ganaron una fama mundial. No fue sólo por su aparición en Nordelta. Se hicieron famosos en todo el mundo, pero son conocidos como capibara. A tal punto, que se hicieron populares hasta en Japón. Saltaron al estrellato porque su imagen relajada y amigable se viralizó. Se convirtieron en uno de los términos más buscados en Google y hasta la gastronomía aprovechó la movida y abrió bares en varios países. Lo más curioso es que el término capibara superó en búsquedas de Google al mísmisimo Lionel Messi. Cómo nace este fenómeno que hace furor y factura fortunas en todo el mundo.

Evangelina Suárez, Directora Comercial de Retail Google Argentina, señaló “Se trata de microtendencias que nacen y se viralizan en las redes y que luego impulsan la intención de compra entre los usuarios. Un ejemplo es el caso capibara: el furor por los productos asociados a la figura de este animal. Se trata de un fenómeno que se viralizó en redes sociales en el último año y que tuvo un correlato directo en el crecimiento de búsquedas en Google en los últimos 12 meses en Argentina, creando picos de demanda repentinos y signicativos. Durante algunos días, coincidentes con la previa de la vuelta a clases en Argentina, el término capibara superó en cantidad de búsquedas al astro del fútbol argentino Lionel Messi. Esto no es solo una moda pasajera, es una señal sobre cómo se comportan los consumidores, especialmente los más jóvenes”.

 

 

Qué es un capibara

El boom encuentra explicaciones en factores ecológicos, culturales y digitales. Los carpinchos o capibaras son roedores que llegan a pesar hasta 70 kilos y miden 1,5 metros. Son semiacuáticos, tienen ojos y narices en la parte superior de la cabeza para esconderse de los depredadores. Viven en manadas, son muy tranquilos. Se dejan acariciar si no se los asusta.

Este roedor se viralizó a través de memes y videos en Tik Tok. En 2020 aparecieron en el animé Kapibarasan y en 2025, en la película animada Flow que ganó el Oscar. Disney lanzó su película Encanto y allí apareció Chispí, el capibara. El videojuego  Animal Crossing, también se sumó a la movida. Hasta en WhatsApp los usuarios los usan para personalizar los chats, emojis y los tonos de notificación.

 

A nivel local, en el 2021 los carpinchos saltaron a la fama porque invadieron Nordelta. En realidad, porque los habitantes de esa zona construyeron sus casas sobre humedales desmontados en los '90, eliminando el habitat natural de los carpinchos. En la pandemia, con menos gente en la calle, los carpinchos se rebelaron y perdieron el miedo, comenzaron a salir y a recolonizar áreas urbanizadas. En Nordelta no vieron el negocio, si hubieran hecho un bar, hubieran facturado muy bien.

La historia de la canción de los capibaras

En poco tiempo, la moda dio la vuelta al mundo. En Japón, gracias al animé se hicieron íconos en Kawaii. La canción del Capibara batió todos los récords. Fue creada por un joven ruso de 22 años llamado Alexéi Pluzhnikov en una madrugadaque estaba desvelado. En un mes tuvo 3 millones de visitas. La canción se hizo increíblemente viral en TikTok; hay incluso un lugar llamado 'CapybaraTok', donde los usuarios comparten sus textos con el fondo de la canción y ya hay más de 300.000 vídeos de esta canción. La canción se posicionó entre las 200 más escuchadas en 28 países, y en ocho de ellos está entre las 20 primeras, con Tailandia en el top de reproducciones. El autor confesó que hizo el tema una noche que se desveló, compró una melodía adecuada y  como en su trabajo estaban haciendo algo con un capibara sólo repitió el nombre muchísimas veces y listo. Creó el tema en apenas 30 minutos y hoy su tema tiene más de 6 millones de reproducciones. 
Su tema dio vuelta al mundo y todos la tarareaban, grandes y chicos. La imagen del roedor comenzó a explotar y se empezaron a vender desde peluches, cuadernos, relojes, mochilas, pantuflas, llaveros, broches de pelo, de todo.

Dónde hay bares de capibaras

Los chicos argentinos y del resto del mundo se volvieron fanáticos. Es tal el furor que en el barrio de Recoleta, en Buenos Aires hasta hay un bar de capibaras. Todo está decorado con las imágenes de estos roedores, hasta hay hay galletitas con forma de estos animalitos. El logro es que es un bar para chicos, porque les dan hojas de papel y pinturitas para que los dibujen y luego empapelan las paredes con las obras de los pequeños. Un espacio que no sólo convoca a adultos, sino que atrae a niños que van a merendar y a dibujar.

En Florida, Estados Unidos, funciona desde el año pasado The Capybara Café. Ofrece una experiencia única, permite que sus visitantes puedan jugar y acariciar a los carpinchos. El costo para un encuentro de 30 minutos es de 49 dólares por persona, mientras que para los que quieran tocarlos durante una hora, el costo sube a 99 dólares. Aseguran que apoyan a la organización sin fines de lucro Noah’s Ark Sanctuary Inc.. Entran a una habitación en grupos de seis personas y juegan con tres capibaras. El éxito es increíble, las reservas se agotan con varios meses de anticipación, por eso, los dueños abrirán un nuevo local en St. Petersburg, Florida.Todos se encariñan con estos animalitos que parece son muy mansos, tranquilos y se dejan acariciar. 

En Japón, abrieron un Café Capyba en Tokyo, Japón, donde los visitantes pueden jugar y acariciar a dos capibaras que deambulan por el local. La primera media hora de permanencia en el local cuesta alrededor de 9 dólares, sin contar los consumos. Toman reservas con dos semanas de anticipación, aunque aseguran que no es fácil conseguir lugares. Sólo se permite la entrada de niños mayores de 6 años y hasta los 12 deben estar acompañados por sus padres. 

El fenómeno de los capibara crece y se multiplica. Es posible conseguir toda clase de productos con su imagen.