Luego de su primer encuentro con el secretario de Trabajo, Julio Cordero, el sector dialoguista de la CGT realzó la posibilidad del coloquio como alternativa para enfocar los efectos negativos para el mundo del trabajo generados por el programa económico de la gestión Milei. Los sindicalistas enfatizaron que su requerimiento abarcó la caída de la actividad y consumo, la recesión, despidos y suspensiones, como otros temas de agenda.

A través de sus voceros la central remarcó haber planteado ante el funcionario que el Gobierno “privilegia los tópicos financieros a otras variables que los trabajadores y trabajadoras, formales e informales y jubilados, están padeciendo desde diciembre”.

No obstante, la expectativa de continuar el plan de lucha -que ya tuvo dos paros generales- y será motivo de análisis del consejo directivo de Azopardo el jueves 25, no ofrece temperatura mínima más allá del malestar de algunos sindicatos sobre el particular.

El titular de UPCN y adjunto cegetista Andrés Rodríguez, resaltó la importancia de iniciar un espacio de “diálogo formal” con el Gobierno. La dinámica de conversaciones incluye la inminente reglamentación del capítulo laboral de la ley de Bases. 
“Hemos pedido participar junto al sector empresario en esa reglamentación, porque hay temas difusos y que pueden perjudicar al mundo del trabajo”, expresó el gremialista de estatales sobre el encuentro con Cordero.

Las diferencias clásicas de Azopardo

El tono de las declaraciones de Rodríguez como también la versión del triunviro Héctor Daer sobre la conformación de una mesa tripartita para analizar la ley Bases certifica una grieta en la CGT, sobre la base clásica de diferencias entre dialoguistas y combativos.

Porque a los dichos de ambos dirigentes citados corresponde contraponer las ausencias en la reunión con Cordero de los otros dos cosecretarios, Pablo Moyano y Carlos Acuña, como también de dirigentes del moyanismo y el sector que se referencia en Luis Barrionuevo, el que integra Acuña.

Sin perjuicio de ese dato importante, Rodríguez se mostró expectante a las definiciones que puedan surgir desde el Ejecutivo respecto a las demandas elevadas, que incluyen la quita salarial por Ganancias, paritarias libres y homologación de convenios colectivos.

“Quedó conformada una mesa de diálogo, de búsqueda de consensos y veremos cuáles van a ser los resultados efectivos. Esperemos que puedan realizarse porque así lograríamos introducir una mecánica de negociación acorde con lo que necesita un país desarrollado: lograr acuerdos a través del diálogo”, dijo el titular de UPCN.

Daer informó que el gobierno mantendrá la próxima semana una reunión con el sector empresario y luego se conformará una mesa tripartita para abordar la nueva legislación, "será una mesa técnica para definir con precisión la reglamentación de estos artículos, que tienen una gran vaguedad, en la legislación laboral que salió de la ley de Bases”, adelantó.

El triunviro sostuvo que la Casa Rosada se comprometió a gestionar los pedidos de la CGT.