El impacto de los audios del ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad, Diego Spagnuolo, sobre el supuesto pedido de coimas a la droguería Suizo Argentino no solo afectó a las esferas internas del Gobierno, sino que empezó a preocupar a la población.

Una encuesta realizada por Trends Data a nivel nacional con 2181 casos reveló que la corrupción se consolida como el principal problema de Argentina con el 16%. Le siguen la economía con 15%, el Gobierno con 13% y los bajos salarios con el 12%. La inseguridad recién aparece con el 6%.

El 53% de los argentinos desaprueba la gestión del presidente Javier Milei, mientras que el 45% lo aprueba. Las estadísticas negativas se mantuvieron desde marzo, pero en agosto se dispararon cuatro puntos. Las positivas también bajaron en los últimos cinco meses.

La imagen del jefe de Estado se mantiene pareja: 48% de positiva y 50% de negativa, pero es el dirigente político mejor valorado del país junto a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

Sobre la corrupción en el Gobierno, el 51% de los consultados está de acuerdo en vincular a los libertarios con estos hechos delictivos y el 39% está en desacuerdo.

Consultados sobre el entorno del Presidente, el 64% valora en forma negativa el ambiente que rodea a Milei y cree que lo debilita. Solo el 21% lo valora positivamente. El 50% cree que La Libertad Avanza “es más de lo mismo” y el 41% considera que el partido libertario “es diferente a la vieja política”.

Lo llamativo es que pese a que la mayoría desaprueba la gestión, LLA encabeza la intención de voto en las elecciones legislativas de octubre. El 41,3 % de los encuestados votaría al oficialismo, mientras que solo el 20,5% lo haría por el peronismo. Pero si se le suma el kirchnerismo con 17,4% tampoco llega a derrotar a la administración actual. El PRO llega apenas a 4,5% y la izquierda a 2,5%. 

El techo electoral de La Libertad Avanza es 49%: el 41% “seguro lo votaría” y el 8% “podría llegar a votarlo” en los comicios nacionales del 26 de octubre.