El Gobierno envió el proyecto para eliminar las PASO y evalúa llevarlo a extraordinarias
El oficialismo apuesta a una división en el PRO y al apoyo del peronismo para conseguir los votos. Los detalles del proyecto y la posibilidad de que se traten en extraordinarias
En medio del conflicto por el Presupuesto 2025, Gobierno envió este jueves al Congreso su ansiada reforma electoral, compuesta por dos proyectos de ley que proponen eliminar las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), reducir el financiamiento estatal de los partidos políticos y modificar la estructura partidaria.
“Menos recursos para la política, más recursos para los argentinos”, celebró el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien anunció formalmente que iban a impulsar esta reforma días atrás. Ingresó esta tarde, a una semana de que finalicen las sesiones ordinarias.
“No descartamos pedir extraordinarias para las PASO, pero estamos evaluando cómo ordenamos el Presupuesto”, dijeron del oficialismo en diálogo con BAE Negocios, luego de que enviaran los proyectos. La diferencia sustancial es que en período extraordinario el temario es fijado por el Gobierno y, de esta manera, solo se tratarán los temas que ellos convoquen.
AntecedentesLa reforma fue descartada de la Ley Bases original y, después de su sanción, intentaron volver a presentarla en julio. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en ese entonces se reunió con los bloques aliados y se llevó la noticia de que no tenía futuro.
“Nosotros queremos marcar nuestra posición de que queremos eliminarlas y después que salga lo que salga”, le habían dicho los funcionarios a los jefes de bloque, pero la oposición marcó la agenda con las jubilaciones y el presupuesto universitario durante todo el segundo semestre.
El asesor presidencial Santiago Caputo volvió a poner las PASO sobre la mesa ante la demanda opositora para aumentar el financiamiento de las Universidades. Como contó este diario, se trató de una medida que iba a ser anunciada de manera improvisada por el diputado y presidente de la comisión de Presupuesto, José Luis Espert, sin acuerdo con el PRO. Fue suspendido por el desplazamiento de la excanciller Diana Mondino.
“Lo que quieren hacer es marcar un principio de revelación, mostrar que la política no se quiere ajustar para aumentarle a las Universidades. Pero con esta reforma no alcanzaría, de todos modos”, interpretaron en diálogo con este diario desde la bancada que conduce Cristian Ritondo. No hubo mesa parlamentaria en Casa Rosada desde ese entonces.
Qué opina “la casta” de las PASO“Creo que se puede llegar a tener los votos”, consideró Francos hoy, en diálogo con Radio Rivadavia. La Libertad Avanza apuesta a una división en el PRO y al apoyo del peronismo para reclutar a los 129 que necesitan para aprobarlo.
El escenario desde julio cambió y asoman un debate tenso entre los intereses de los oficialismos de las provincias que se contraponen con los que necesitan de las PASO, como es el caso de los partidos más chicos.
Del PRO habían contemplado eliminar la obligatoriedad (unas PAS) pero esa iniciativa, alertaron del radicalismo, facilitaría a que otros sectores políticos que no se someten a internas influyan en la campaña de los partidos políticos que sí.
Por su parte, la idea de modificar y reducir el financiamiento de los partidos sí se había llevado el visto bueno de los bloques dialoguistas, especialmente de la Coalición Cívica -que tenían su propio proyecto para hacer una revisión del aporte tributario en campaña-.
El proyecto para eliminar las PASO, llamado “Reforma para el fortalecimiento electoral”, incluye además un apartado exclusivamente dedicado a modificar el financiamiento de los partidos políticos. La propuesta del Gobierno libertario es que los privados se encarguen de financiarlos, con un mínimo aporte estatal que se reduce al aporte anual del Fondo Partidario Permanente. De esta manera, el Estado dejaría de financiar la campaña política de los partidos.
Los aportes privados tendrían sus limitaciones. En primer lugar, habría un tope de inversión por persona física o jurídica, equivalente al 35% del Fondo Partidario Permanente, y prohibiciones a quienes estén procesados por lavado de activos, terrorismo, narcotráfico y otros delitos.
Por otro lado, la llamada “Reforma de Partidos Políticos” apunta a elevar levemente el porcentaje de afiliaciones requerido para constituir un partido político de distrito, del 0,4% actual al 0,5%, aumentando el tope desde 1 millón a 2 millones de electores. “De este modo, el porcentaje efectivamente requerido en los distritos más poblados tenderá a asemejarse a aquel requerido en el resto de los distritos”, explican en el comunicado.
Con respecto a los partidos nacionales, se proyecta elevar de cinco a diez el número de distritos necesarios para alcanzar el reconocimiento como tal. Asimismo, se incorpora como exigencia el contar con un mínimo del 0,1% de los afiliados del Registro Nacional de Electores.
También propone modificar las condiciones de representatividad para la caducidad partidaria. “Con razonable criterio, la ley vigente exige a los partidos políticos obtener al menos un 2% de los votos cada dos elecciones nacionales sucesivas para mantener personería jurídica”, alegan, “Sin embargo, esa cláusula ha perdido operatividad desde que los partidos políticos concurren al proceso electoral en el marco de alianzas en las que participan numerosos partidos”. En ese sentido, impulsan que si un partido no obtiene un piso de 3% en vez de 2% del padrón electoral en dos elecciones consecutivas, perderá la personería.