El Gobierno decidió convocar al Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo Vital y Móvil para el jueves 13 desde las 16, una vez más bajo el formato de videoconferencia. El decreto correspondiente será publicado en las próximas horas en el Boletín Oficial, con lo cual las deliberaciones de empresarios, sindicalistas y el Gobierno se suman a la agenda paritaria de julio, como anticipó BAE Negocios.

Tanto para las mesas de discusión colectiva de los gremios como para modificar el haber mínimo tendrá incidencia el número de inflación de junio y va de suyo que también los tiempos preelectorales y de campaña política, asumieron desde todos los sectores participantes.

Al Consejo del Salario (CNS) son convocados representantes de las tres centrales sindicales, a saber: CGT, CTA de los Trabajadores y CTA Autónoma; junto con dirigentes de las principales cámaras empresarias del país. En la última edición se determinó que el SMVM llegue a $87.987 desde el 1ro de junio. No fue por unanimidad ya que la CTAA votó en contra y sus pares de la CTA a cargo de Hugo Yasky se abstuvieron, fue la central de Azopardo la que validó el acuerdo.

En efecto, la votación se cerró con 30 votos positivos, una abstención y un sufragio negativo a ese incremento. El CNS tal como lo fija la ley, debe establecer además los montos mínimo y máximo de las prestaciones que se cobran por desempleo.

El hecho de que el debate salarial se realizará por videoconferencia, como viene sucediendo desde la pandemia y en la última actualización con el 26,6% dispuesta por el Consejo del Salario (CNS), no privó que la mesa tuviera fricciones expuestas, incluso desde el mismo bloque de la CGT que participó de las deliberaciones. Hubo voces severas con respecto a tópicos varios y fuertes cruces con los representantes de la UIA. Pero además los encontronazos detonaron la Casa Rosada, ya que dos ministros, la titular de Trabajo Kelly Olmos y su par de Interior, Wado de Pedro, llevaron la polémica por la aplicación de sumas fijas, como complemento paritario a fricciones máximas en declaraciones a los medios.

Ante la inquietud de De Pedro a favor de la postura del pago de sumas fijas, como promueve el kirchnerismo y el arco sindical afín a Cristina Fernández, Kelly Olmos, no fue protocolar: "Le digo a Wado de Pedro que el sector salarial más retrasado es el de los municipales de la Provincia de Buenos Aires. Ahí tienen que intervenir porque yo no tengo competencia y la PBA sí". Un misil lanzado desde la Capital Federal hacia la ciudad de La Plata y contra el equipo que comanda el gobernador provincial Axel Kicillof. La respuesta no se hizo esperar en la ocasión y fue ministro de Trabajo el sindicalista Walter Correa, referente de la Corriente Federal (CFT) que ironizó que la titular de la cartera laboral nacional “no tenía la información adecuada” para manifestarse en esos términos.

Olmos, al igual que su antecesor Claudio Moroni, sostienen la tesitura por la dinámica de paritarias "con revisiones las veces que sean necesarias", contra la inflación. Dicha postura tiene acuerdo firme con el núcleo dominante y dialoguista de la CGT y sobre todo la UIA. El estamento industrial sigue terciando con firmeza en cada discusión salarial.