El oficialismo pospuso el debate del proyecto de la Ley Ómnibus hasta la semana próxima, en medio de los reacomodamientos internos y las negociaciones con la oposición por el texto de alivio fiscal. El tratamiento en comisiones comenzará entre el martes y jueves y recién en mayo se llevaría al recinto. 

La abrupta ruptura del bloque de La Libertad Avanza, que dejó afuera a Oscar Zago, Cecilia Ibañez y Eduardo Falcone y redujo a 38 sus integrantes, modificó el escenario que el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, tenía previsto para el debate de la nueva versión de la iniciativa que impulsa el Ejecutivo nacional. La partida de los tres legisladores dejó al espacio libertario en un estado de ebullición permanente, que pone en duda cuál será la composición final y el funcionamiento de la bancada oficialista.  

"Hay por lo menos seis diputados más que quieren irse", dijo a BAE Negocios uno de los integrantes del bloque de La Libertad Avanza, que aguarda expectante el devenir de los acontecimientos. La falta de respuesta de la Casa Rosada a los reclamos de sus propios legisladores hace que más de uno dude sobre qué camino tomar. Por ahora, prefieren no sacar los pies del plato. El principal problema que destacan algunos de ellos es que vienen quedando afuera del reparto de lugares de poder en sus respectivas provincias, así como también en el terreno parlamentario, lo que alimenta las sospechas de que serán excluidos del armado libertario a nivel nacional que promueve la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei.

Los diputados que ya se fueron no aseguran un apoyo incondicional a la Ley Ómnibus. Tampoco está tan claro lo que harán quienes se sienten ninguneados por el presidente Javier Milei y su círculo más cercano. "¿Qué pasa si empezamos a votar en contra de lo que pide la Rosada?", señaló uno de los legisladores libertarios que no descarta ir detrás de los pasos de su ex jefe de bloque. A las negociaciones con la oposición, Menem deberá sumarle un trabajo extra para pegar las partes de una bancada que parece desmoronarse de a poco. 

Sin embargo, la principal razón por la que se modificaron los tiempos del debate responde a que el ministro del Interior, Guillermo Francos, continúa negociando con los legisladores opositores el proyecto de alivio fiscal, que buscarán tratarlo en paralelo a la Ley Ómnibus. La letra final del texto también está atada a los acuerdos a los que arribe con los gobernadores. El funcionario mantuvo una reunión esta mañana con el mandatario de Santa Cruz, Claudio Vidal, para conversar sobre varios temas, pero el resultado no fue el esperado para ninguno de los dos.    

En busca de un mayor respaldo, Francos, además, participó del acto de asunción del gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, a la presidencia de la Región Centro; y, por la tarde, viajó a Santiago del Estero para reunirse con el mandatario de esa provincia, Gerardo Zamora. 

En Balcarce 50, tienen la expectativa de que el paquete fiscal ingrese a la Cámara baja este mismo jueves para ser tratado luego en la comisión de Presupuesto y Hacienda, que conduce José Luis Espert. Se espera que expongan distintos funcionario del Palacio de Hacienda, pero desde la oposición solicitaron que sí o sí asista el ministro de Economía, Luis Caputo, que viajará este miércoles a Washington para reunirse con el FMI.  

Entre el martes y el jueves de la semana próxima, se empezaría a discutir el proyecto de la Ley Ómnibus en el plenario de las comisiones de Legislación General, de Asuntos Constitucionales y de Presupuesto y Hacienda.   

Otro de los escollos con los que se topó el oficialismo para avanzar en este debate es que se comprometió a tratar en simultáneo un proyecto de reforma laboral que impulsa un sector del bloque de la UCR, que encabeza Rodrigo De Loredo, y que es resistido por un grupo de legisladores radicales que se referencian en Facundo Manes, así como también por la bancada de Hacemos Coalición Federal, que lidera Miguel Ángel Pichetto.