El registro inflacionario de junio incrementó la mirada positiva del gobierno respecto a su estrategia económica a la par de que para la visión gremial esos números ratifican la dispersión salarial y la pérdida del poder adquisitivo de los sueldos. Desde el 4,6% para el incremento sostenido de precios en el mes pasado, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) reclamó una mejora del 80% en los sueldos y una suma fija.

“La presión inflacionaria no cede y continúa deteriorando salarios y jubilaciones. Además, sin convocar a paritarias, el Gobierno está destruyendo todos los ingresos en el sector público”, denunció el titular de ATE Rodolfo Aguiar. El sindicalista le explicó a BAE Negocios que el pedido de aumento que realizaron por el 80% obedece a una necesidad “impostergable” y  que es “lograr una recomposición salarial en un sólo pago”.

“Desde ATE demandamos una suma fija de carácter permanente que tenga impacto en los sueldos más bajos de la escala y un 80% de aumento en una sola cuota. Esta es la única posibilidad de compensar la caída real que han experimentado nuestros salarios”, agregó.

Graficaron también que creció "de manera drástica" la cantidad de estatales que cayeron bajo la línea de la pobreza en los últimos 7 meses y el nivel de endeudamiento de sus familias. Los trazos de análisis los sustentan con los nuevos valores de la Canasta Básica Familiar (CBF) se necesitan $873.169 para no ser pobre y $393.319 para evitar la indigencia. A partir de esos valores Aguiar recalcó que más del 75% de los estatales nacionales, provinciales y municipales “perciben salarios por debajo de la línea de la pobreza”.

La referencia a los números de la CBF no solo ocupan a los estatales para describir su situación de ingresos, sino también que esa canasta aparece como medida de referencia para los gremios del sector privado, que discuten paritarias desde hace meses y toman ese valor como punto crucial de sus negociaciones.

Aguiar aportó otro dato de los trabajadores y trabajadoras del sector público “se aprecia un llamativo incremento de renuncias de los distintos agentes a la administración pública”. El patagónico subrayó que "se trata de hombres y mujeres con experiencia y formados" que o bien deciden, asumiendo los riegos que devienen de la recesión “tratar de ingresar al sector privado o hasta irse del país. Si no existe un llamado urgente para negociar salarios, se estará ratificando el vaciamiento del Estado. Hablamos de desmantelamiento, desguace de patrimonio, prestaciones y empleados”.

En ATE consideran vinculante a la discusión colectiva, y al ajuste definido por la gestión Milei, que el lunes 1ro, el Gobierno desplegó una represión contra los trabajadores que reclamaban contra los despidos al tiempo que ese mismo día, en la discusión paritaria, “no presentaron oferta de mejora alguna”.

“Los sueldos quedan cada vez más lejos del costo que tiene la canasta básica. Tenemos que prepararnos para incrementar las protestas. Los afiliados esperan que sus sindicatos los defiendan. No hacer nada frente a esto, es ser cómplices de nuestro propio empobrecimiento”, dijo Aguiar.

El Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) 214/06 de la administración pública nacional se negocia de junio a mayo del siguiente año. En ATE ilustraron que para el período 2023-2024, “la pérdida del poder adquisitivo fue del 22,4%”.