Expresidente de Chile amenazó a Néstor Kirchner con una guerra
Ricardo Lagos publicó un libro en el que recordó conversaciones por las fallas del suministro de gas que Argentina tenía que enviar para los hogares chilenos. El argentino le dijo que se quedara tranquilo pero la solución se demoraba. Finalmente, se cumplió con la entrega mínima fijada por contrato
El expresidente de Chile, Ricardo Lagos, reveló que en 2004 amenazó a su entonces colega Néstor Kirchner con declararle la guerra a Argentina si continuaban los problemas con el suministro de gas entre ambos países.
Así lo reveló el propio exjefe de Estado chileno en el segundo libro de sus memorias: “Mi vida. Gobernar para la democracia”, en el capitulo en el que contextualiza la crisis por el gas natural que se vivió entre 2004 y 2009, en momentos en que Argentina comenzó a cortar el suministro a Chile, incumpliendo los términos del contrato entre ambas naciones.
Un adelanto del libro en el que se narra el acontecimiento que revela el nivel de tensión al que llegó la relación bilateral fue publicado por el diario La segunda.
Otra fuente mencionada por el diario, Jorge Rodríguez Grossi, quien se desempeñó en tres carteras diferentes entre 2001 y 2006, recordó el conflicto y que había conversaciones subidas de tono, pero no la emenaza de guerra.
La amenaza de Lagos a Kirchner pic.twitter.com/ixhZMUvrhc
— El Censelio (@Censelio) January 4, 2021Lagos, sin embargo, lo narró con detelles en su libro: "Cuando prácticamente nos cortaron el suministro, llamé a Kirchner y le planteé el problema que esto significaba para miles de hogares chilenos. Su respuesta fue que me quedara tranquilo, que lo arreglaría al día siguiente. Sin embargo, no había que ser ningún genio para darse cuenta de que un asunto de esta naturaleza no podría resolverse en un día”.
El tema no se solucionó y Lagos tuvo una nueva conversación con Kirchner, en la que le habría explicado que el uso industrial del gas argentino podía reemplazarse, pero no así el uso domiciliario.
"Le dije que el día en que las casas no tuvieran gas, me vería obligado a declararle la guerra a su país, porque esa carencia provocaría una revolución aquí", escribió. Y agregó: "Me daba cuenta de lo que significaba mi amenaza, pero no tenía otra herramienta para exigir que se cumpliera el contrato”.
De los 23 millones de BTU de gas que Chile importaba de Argentina, 1,5 millones se destinaba a los hogares y el resto era de uso industrial.
El conflicto finalmente se saldó porque Argentina cumplió con el suministro mínimo previsto en los contratos, en tanto que Chile compró los servicios de barcos gasificadores para completar su abastecimiento.
Sin embargo, los supuestos pormenores del alcance que tuvo la crisis se conocen recién ahora, por las inesperadas revelaciones de Lagos.
Ambos países ya habían estado a punto de entrar en una guerra en 1977, al disputarse una zona de controversia en el extremo sur, conocida como el Canal de Beagle, pero la intermediación del Papa Juan Pablo II evitó el conflicto armado.
El compromiso de KirchnerEl 15 de marzo de 2005, Kirchner se comprometió a realizar todos los esfuerzos necesarios para garantizar los envíos de gas a Chile y fustigó a las empresas por no haber invertido y recortar las ventas al otro lado de la cordillera.
"Chile es un socio estratégico de Argentina", aseguró el por entonces presidente argentino, quien enfatizó que la Argentina haría todos los esfuerzos que pueda para seguir incrementando su producción, y de esa manera "ayudar y apoyar a la república hermana de Chile".