La actualidad de la discusión por mejoras salariales en la órbita nacional están signadas por el férreo techo dispuesto por la Casa Rosada, en la estrategia antiinflacionaria con ajuste de haberes. Mientras que en la Provincia de Buenos Aires, donde el dato político es la buena relación del arco gremial de estatales con el gobernador Axel Kicillof la demora para cerrar la actualización de los sueldos abre especulaciones, ansiedades y postergaciones de las mesas para la negociación colectiva.

El lunes los sindicatos estaban citados para negociar, pero el encuentro se postergó para este miércoles.  La primera ronda de reuniones había sido a mediados de abril. Allí, las autoridades del Ministerio de Trabajo a cargo de Walter Correa no hicieron ofertas, solo escucharon las expectativas de los dirigentes gremiales.

Esta mañana fuentes de la gobernación provincial reseñaron a BAE Negocios que por la tarde “habrá reuniones informales” con los dirigentes que representan al personal administrativo, educación, salud y otras áreas. La dinámica de esas conversaciones tienen que ver con la nueva propuesta que hará la Provincia a los gremios.

Los mismos informantes confirmaron que a la fecha, como había publicado este medio, evaluaban desde el equipo de Kicillof datos como la inflación en CABA, las proyecciones de otros analistas para el incremento sostenido de precios y además la disposición de recursos con los que cuenta esa gestión. Hay “moderado optimismo” para afinar un “número satisfactorio” en la nueva oferta, resumieron las fuentes.

En el segundo encuentro del mes pasado la Provincia ofertó un: 7% escalonado. Una cuota del 4% para mayo y un 3% en junio sobre la base salarial de marzo. Hubo rechazo sindical y todo pasó a un cuarto intermedio.

El miércoles pasado el equipo de Kicillof tenía previsto retomar las negociaciones para los empleados comprendidos en la ley 10.430. Dicha norma establece el régimen para el personal de la administración Pública. A saber: los derechos, deberes, obligaciones y responsabilidades de los agentes de la administración pública provincial, incluyendo horarios de trabajo, licencias, sanciones disciplinarias, entre otras cuestiones.

Tiempo de reprogramación con agenda oficial para abrir la mesa paritaria este lunes 12. En rigor del “vamos viendo”, en voz baja y siempre entre ansiedades la cita pasó para mañana.
Y siempre en paralelo a la aceitada relación entre el gobierno provincial y las organizaciones sindicales en el flanco gremial se asume que las negociaciones, de mínima, vienen “cuesta arriba”.

Apuntes varios: la  Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia (Cicop), le pidió a Kicillof un aumento por adelantado para los jubilados.
“Por la reprogramación de la paritaria y considerando que ya estará cerrada la liquidación para jubilados, junto a los gremios que integran ambas CTA, solicitamos que se liquide a jubilados un aumento salarial”, es el texto que consta en la solicitud gremial.

En conferencia de prensa el ministro de Economía de Kicillof, Pablo López, explicó que las reprogramaciones de la mesa paritaria se basan en que la Provincia está “buscando una propuesta en las mejores condiciones posibles”. El corset de recursos para la administración bonaerense tiene lugar, en versión oficial, por el ajuste impuesto por la Casa Rosada con el recorte de transferencias y sumado a este factor apremia la caída de la actividad que impacta en la recaudación tributaria provincial.