La UCR , convulsionada por la designación de Alfonsín

La Juventud pide que lo expulsen

BAE Negocios

El radicalismo aprovechó la nominación del dirigente Ricardo Alfonsín como embajador en Madrid para retomar la actividad del internismo y marcar las diferencias entre el sector del partido que formó parte de la coalición Cambiemos-Juntos por el Cambio y quienes se alinearon en el sector crítico al macrismo.

El presidente de la Juventud Radical de Buenos Aires, Martín Borrazas, dijo que "ya tiene preparado" el pedido de expulsión contra Alfonsín, por haber aceptado ser el embajador en España del gobierno de Alberto Fernández y que lo presentará "en los próximos días en el Comité de la Provincia de Buenos Aires", ydistrito al que pertenece el propuesto diplomático.

El líder de la Juventud bonaerense cuestionó la decisión del ex diputado nacional de aceptar el ofrecimiento de Fernández y aseguró que la carta orgánica del partido establece que no se pueden integrar "listas o gobierno que no se condicen" con los lineamientos de la UCR.

Ricardo Alfonsín minimzó las críticas. "Si me quieren echar del partido, que se hagan cargo, no me preocupa, es todo fuego de artificio". y agregó: "Antes de aceptar el cargo hablé con Gerardo Morales (gobernador de Jujuy y hombre fuerte en la UCR). Me dijo que no podía decirle que no a Alberto. Me llamaron (Enrique "Coti") Nosiglia, (el mandatario mendocino) Rodolfo Suárez, (Martín) Lousteau y (Federico) Storani y me dijeron lo mismo".

Un poco de racionalidad

Tras conocerse la decisión del presidente, diputados y referentes nacionales del radicalismo cercanos al PRO habían salido a a cuestionar a Alfonsín por aceptar el destino diplomático en Madrid. Entre ellos, el diputado nacional y presidente del Comité Nacional, Alfredo Cornejo, quien vía Twitter aclaró: "El cargo de Ricardo Alfonsín como embajador en España es una decisión personal y nada tiene que ver el radicalismo en ello".

Por su parte, el diputado nacional Facundo Suárez Lastra puso equilibrio y consideró que la decisión deaceptar el ofrecimiento fue "personal que respeto, me parece razonable que un gobierno elegido por el pueblo convoque a una persona de prestigio como él. No comparto muchas de las críticas que se han hecho". De todos modos, advirtió que esperaba que "no sea un intento de cooptación" .

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