Macri "no es el líder ni el referente de Juntos por el Cambio"
El Presidente de la CC-ARI de Provincia criticó la gestión económica del ex presidente y afirmó que la coalición opositora "necesita tener liderazgos no tan excluyentes". Massot se sumó a los cuestionamientos y dijo que Macri "subestimó al ala política"
Las apariciones mediáticas del ex presidente Mauricio Macri en la última semana siguen generando repercusiones dentro de la propia coalición de Juntos por el Cambio. El presidente de la Coalición Cívica-ARI bonaerense, Andrés De Leo, afirmó que Macri "no es el líder ni el referente" del espacio opositor, mientras que el ex diputado Nicolás Massot dijo estar "sorprendido" por sus críticas al sector filoperonista de la alianza.
"El ex presidente Macri tiene un espacio, pero claramente no es el líder ni el referente de Juntos por el Cambio", resaltó De Leo en declaraciones a NA, y aclaró que "ningún dirigente representa la totalidad del espacio".
En ese marco, y sin hacer referencia al resultado de las elecciones, que convirtieron a Macri en el primer presidente que se presenta a la reelección y no la logra, el presidente de la Coalición Cívica bonaerense precisó: "Nadie puede negar la importancia de un ex presidente, pero Juntos por el Cambio necesita tener liderazgos no tan excluyentes. La ciudadanía que nos ha votado no eligió un líder".
Al ser consultado sobre las expectativas que tiene de cara a las elecciones legislativas de 2021, respondió: "Si el Gobierno nacional y el provincial no hacen un cambio del rumbo importante, sobre todo en materia económica, tengo la sensación de que van a tener una elección muy difícil. La sociedad los va a castigar".
Durante una entrevista con Noticias Argentinas, De Leo afirmó que la Argentina está "frente a una situación de extrema crisis", y detalló: "Hay que ser conscientes de que acelerar o precipitar una crisis puede llevar a una frustración de la ciudadanía. Tenemos una crisis política, económica y sanitaria".
En esa línea, cuestionó el "manejo" de la pandemia por parte del presidente Alberto Fernández y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y apuntó que "ha sido un fracaso la política sanitaria".
"El Gobierno apostó todo a una cuarentena in aeternum que no pudo ser sostenida en el tiempo. Ahora estamos pagando las consecuencias de un descontrol en materia de los contagios, tenemos un número muy importante de fallecidos, y con todos los efectos negativos en materia económica", describió.
Sin embargo, De Leo reconoció que "había que ganar tiempo" para "preparar el sistema sanitario", porque en la provincia de Buenos Aires "viene con muchas deficiencias".
"Uno puede aceptar que las medidas fueron demasiado duras, pero inicialmente eran necesarias. Con el tiempo se apostó a esa única estrategia, sabiendo que iba a provocar perjuicios y un relajamiento de la cuarentena como terminó ocurriendo por parte de la gente", resaltó.
Al referirse al número de casos de coronavirus, cuestionó: "Ni siquiera sabemos a ciencia cierta en qué nivel estamos. Me cuesta creer que el nivel de contagios en el Conurbano ha bajado como las autoridades están diciendo".
"Hubo un desmanejo de los datos y una no aceptación de parte del Gobierno de la Provincia. Además, existió una manipulación de los datos, por lo menos desde el punto de vista comunicativo de cómo eran las estadísticas en la Provincia", enfatizó De Leo.
La sopresa de Massot y el ala filoperonistaLas declaraciones el domingo por la noche del ex jefe del bloque del PRO en Diputados, Nicolás Massot, agitaron todavía más las aguas en Juntos por el Cambio.
En una entrevista con C5N, Massot se mostró "sorprendido" por los dichos de Macri en los que cuestionó, sin nombrarlos, al ex ministro del Interior Rogelio Frigerio y al extitular de la Cámara de Diputados Emilio Monzó durante la gestión de Cambiemos y lo atribuyó a la "autocrítica" que ese sector realizó a poco de asumir, cuando le advirtió a Macri sobre el cambio en el espíritu original de la coalición de Gobierno.
"Nosotros empezamos la autocrítica cuando estábamos en el Gobierno, no diez meses más tarde de haber perdido", le reprochó Massot al ex presidente.
"Tal vez haya sido esa autocrítica que consideraron inoportuna la que nos haya costado estas declaraciones actuales", aseguró.
El ex diputado, que actuó como mano derecha de Monzó en Diputados, se manifestó "sorprendido" por las declaraciones de Macri, quien durante una entrevista había cuestionado la labor de un sector del ala política en su gobierno. "Nunca debí haber delegado la negociación política y yo la delegué en mi ala más política, con filoperonistas tanto en la Cámara de Diputados y los gobernadores", había dicho Macri.
Massot contó que en 2017 plantearon puertas adentro del Gobierno que habían "perdido el espíritu original con el que habíamos llegado al poder: el espíritu de unidad de los argentinos".
Además acusó a Macri de ser el responsable de que su Gobierno comenzara "a girar en sí mismo con actitudes muy autorreferenciales y de prejuicio con el peronismo y la oposición en general".
"No se trató de un problema de delegación, sobre todo se trató de un problema de subestimación de la política", fue la mirada de Massot, quien dijo que prueba de ello fue la convocatoria "urgente y tardía" del peronista Miguel Ángel Pichetto para completar la fórmula presidencial de Cambiemos.
Massot tampoco coincidió con el ex mandatario en su afirmación de que el peronismo estaba "secuestrado" por la vicepresidenta Cristina Kirchner. "Yo no comparto que esté secuestrado ni que sea monolítico. Creo que fue y posiblemente siga siendo muy heterogéneo y diverso. Y fue esa heterogeneidad la que nos permitió tejer acuerdos" durante la gestión de Cambiemos.
Pero opinó que "esa suerte de entendimiento del gobierno fue abandonado por el Poder Ejecutivo unilateralmente".
La estrategia de MacriSegún fuentes de su entorno, Macri buscará revalidar su liderazgo dentro del PRO y de JxC, en principio para mantener fuerte a su sector "duro", tener influencia en las listas nacionales que se vienen y mostrar voz y voto en la elección del próximo líder de la coalición opositora.
Justamente el regreso mediático de Macri marcó las diferencias con este sector, que busca armar un nuevo polo opositor, con más peronistas y lejos del macrismo.
Sin embargo el grupo de Monzó y Frigerio, que engloba a más de una docena de diputados en frágil alianza con Juntos por el Cambio, rompió el silencio por boca de Massot. Todo ese sector cree que el reproche público de Macri los fortaleció en su posición moderada "alejada de los extremos" como se definen ellos mismos.