Por vez primera desde su renuncia como triunviro de la CGT, el camionero Pablo Moyano coincidió en un acto público con su padre, Hugo Moyano. Fue durante la jornada de 30 ollas populares solidarias organizadas en el barrio porteño de Constitución por el Frente por la Soberanía, el Trabajo Digno y los Salarios Justos. En esa ocasión, el ex cosecretario general no ahorró críticas hacia sus ex compañeros de Azopardo.
“Te sentás en el Pacto de Mayo y al otro día te cierran Vialidad Nacional”, disparó Pablo, aludiendo a lo que considera una maniobra de deslegitimación de los acuerdos institucionales por parte del Gobierno.
Ese textual resume su mirada sobre la gestión de Javier Milei, que ya había expresado en las ollas populares que el gremio de Camioneros llevó adelante días atrás en Esteban Echeverría y Monte Grande. “Un gobierno que permanentemente está atacando a los más débiles, a los humildes, a los jubilados, a los trabajadores, a los chicos con capacidades diferentes, a los hospitales”, denunció el dirigente sindical en el Conurbano.

Camioneros presenciales

En la manifestación del 9 de Julio ya se había anticipado la participación de Hugo Moyano como referente máximo del sindicato. El primero en llegar a Constitución fue Pablo y, más tarde, su padre; compartieron algunos minutos en esa zona de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Más allá del gesto simbólico, el reencuentro para algunos allegados y sindicalistas se interpretó como un mensaje interno al movimiento obrero, en medio de la ofensiva oficial sobre el empleo público y la obra pública.
El ex triunviro destacó el perfil de la convocatoria, a la que caracterizó como una expresión genuina del sindicalismo que “no convalida” la agenda gubernamental. “Estamos reclamando que cese el hostigamiento contra el transporte. Yo no creo que haya que sentarse a dialogar en el Pacto de Mayo. ¿Para qué te sentás si al otro día te cierran Vialidad Nacional? Cinco mil compañeras y compañeros hoy están a la deriva”, cuestionó.

Con Francisco, desde Cemento

Bajo el marco orgánico del Frente por la Soberanía, el Trabajo Digno y los Salarios Justos, y con el respaldo de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), que conduce Juan Carlos Schmid, se llevaron adelante las 30 ollas populares frente a la Iglesia Inmaculado Corazón de María, en Plaza Constitución, como parte de un plan de lucha contra las políticas del Gobierno Nacional.
También participó la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP). “Esta es una continuidad de la movilización del 25 de junio al Ministerio de Desregulación. Elegimos esta geografía urbana porque aquí predicaba Francisco y aún no era Papa. Siguiendo su ejemplo, decimos; nadie se salva solo”, dijo Schmid.
Para el también titular del gremio de Dragado y Balizamiento, “el Gobierno de Javier Milei representa la imposición de la barbarie económica que avanza con un proyecto salvaje y despiadado, celebrando la crueldad contra los más humildes como si fuera una virtud”.

“Todo está guardado en la memoria”

Otros dirigentes del transporte, como Mariano Vilar (SiCoNaRA) y Mariano Moreno (Centro de Patrones), denunciaron el avance de la desregulación y la entrega de la soberanía nacional: “El decreto 340 implica entregar nuestra independencia económica y permitir que buques extranjeros naveguen nuestros mares y ríos con personal extranjero. Dejamos de transportar nuestros productos con trabajadores argentinos, y eso nos convierte en rehenes”.
Además, insistieron en la "necesidad de defender los intereses nacionales frente a las pretensiones del gobierno nacional de destruir la Marina Mercante y la industria naval", en sintonía con los planteos de los gremios industriales.
Por su parte, la secretaria general del Sindicato de Trabajadores Viales (STVyARA), Graciela Aleñá, manifestó: “Estamos acá para dar un plato de comida y mostrar el hambre que hay en nuestra patria, que este gobierno nefasto no quiere ver. Los 5.200 viales que van a quedar sin trabajo van a tener que venir a pedir en la olla popular. Es hora de decirle basta a este gobierno cruel, que no festeja el Día de la Patria, sino la maldad que viene haciendo desde que asumió”.