La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, presentó hoy para la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) el sistema de dispositivos no letales Byrna, a los cuales definió como "una urgente necesidad".

Desde la Plaza de Armas del ISSA, en el municipio de Ezeiza, Bullrich destacó que la adquisición servirá para "desarticular alguna amenaza que pone en riesgo la integridad física de ciudadanos o de los agentes de las fuerzas que están en acción".

A su vez, la ministra afirmó que servirán a la PSA, ya que "trabaja en los aeropuertos que en general son lugares con gran concentración de gente, donde puede haber momentos de tensión por diversos motivos" y que necesitan "que haya menos armas letales y más armas no letales". 

Además, destacó que decidieron comprar los dispositivos porque "se hacen en el país" y evita el problema de conseguir las municiones que presentan las armas extranjeras. En esta línea aclaró que "Byrna es una marca extranjera que tiene un acuerdo y produce en una fábrica de armas nacionales".

Cómo funcionan los dispositivos no letales

El sistema consta de mil dispositivos, los cuales cuentan con una distancia operativa de hasta 20 metros, con gran precisión y que permiten neutralizar las amenazas sin exponerse, según se informó.

Su uso consta de un mínimo de fuerza. Permite disparos indirectos, hacia techos, paredes, y otros elementos, que despliegan un compuesto químico para incapacitar al agresor sin necesidad de impactarlo.

Los agentes de la PSA probaron las armas

Agentes de la PSA realizaron diversos ejercicios para mostrar como se usa el nuevo dispositivo.

Su primera demostración se dio en el interior de una aeronave donde Agentes Federales Embarcados, utilizaron los dispositivos para neutralizar a un pasajero que discutía con la tripulación y buscaba ingresar a la cabina del piloto.

En otro ejercicio, dos personas armadas dentro de un auto se negaban a obedecer las órdenes del personal policial que luego del fracaso de la intervención de un negociador, son apoyados por el Grupo Especial de Asalto Táctico, quienes dispararon un gas dentro del vehículo.

En el tercer ejemplo se simuló el ataque de un hombre que aparentemente perturbado amenazaba a las personas presentes con un elemento contundente en el hall de un aeropuerto. En este caso, Oficiales de la Guardia de Infantería Aeroportuaria (GIA) junto a un negociador lo reducen tras lanzar al piso un proyectil con agente químico. 

En el último ejemplo aplicaron el protocolo anti-piquetes ante un grupo de manifestantes que cortaban la calle y que luego de que se nieguen al pedido de oficiales de la GIA de volver a la vereda, reciben disparos del sistema no letal para que despejen la calzada. 

"Esperemos que esto ayude a reducir la violencia" finalizó Bullrich, quien estuvo acompañada por el secretario de Seguridad, Vicente Ventura Barreiro, el director nacional de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), Alfredo Hernán Gallardo, y el rector del Instituto Superior de Seguridad Aeroportuaria (ISSA), Pablo Lázaro.